Absolución del cargo principal y petición de cadena perpetua para Toni Negri

El proceso 7 de abril, que juzga a 71 acusados de terrorismo en Italia, entró en su momento culminante al pedir el fiscal cadena perpetua para el diputado y profesor Toni Negri, huido a Francia, y un total de 700 años de cárcel. El punto más destacado, y que abre numerosos interrogantes, es la petición de absolución, por falta de pruebas, del delito de "insurrección armada contra los poderes del Estado" para el mismo Negri y para otros 11 acusados.El fiscal Antonio Marini acusó el sábado a Negri del homicidio de un policía, perpetrado durante un robo, y del secuestro de un ex colega de la izquierda autónoma organizada, que finalizó con la muerte del mismo. Pero la acusación central, "insurrección armada contra los poderes del Estado", se ha derrumbado. No se puede probar que Negri y sus amigos dirigiesen una estructura que promoviera la rebelión contra el Estado.

La larga historia de este proceso, criticado y considerado como un juicio a las ideas más que a los hechos, llega a un punto candente, porque la acusación reconoce que los jefes de los grupos ultraizquierdistas autónomos no eran los cerebros que pretendían estructurar a las bandas armadas en torno a un único colectivo, una suerte de gobierno central del terrorismo.

Puede ser que la detención de Negri y sus compañeros, además de numerosos militantes de Autonomía Obrera, el 7 de abril de 1979, bajo durísimas acusaciones, truncara precisamente sus planes en aquella dirección. Al no haber pruebas contundentes, Negri será juzgado por incitación a robos, asaltos, crímenes y acciones subversivas, realizadas en un marco mucho más reducido y, si cabe, un tanto diluido.

El actual diputado radical no era, pues, director de un proyecto unificador del terrorismo que, con precisa organización política y militar, lanzaría después en gran escala contra el Estado. O si lo era, no puede probarse. No obstante, según el fiscal, el profesor universitario de Padua y un grupo de intelectuales planeaban, a fines de los años setenta, agrupar a todos los núcleos terroristas en una especie de federación de bandas subversivas.

Toni Negri se enterará de los crímenes que se Ie imputan en París, adonde se fugó el 21 de septiembre pasado.