El español Antonio Prieto intenta lograr hoy el título de 'cross' entre siete campeones mundiales
Antonio Prieto ha desariado a siete campeones mundiales y, además, a otros tantos atletas que han subido al podio en las más grandes competiciones atléticas. Hoy se enfrenta a ellos en los campeonatos mundiales de cross (transmitidos en directo por TVE a partir de las 20.00 horas), que por vez primera se desarrollan en Estados Unidos. Sus rivales dominan toda la gama del atletismo de fondo. Hay desde subcampeones olímpicos en 1.500 metros hasta, campeones mundiales de maratón. Prieto es el único atleta de los más de 400 participan tes que va a salir con la firme intención de ganarles. Lleva cuatro meses aguardando este momento. Su consagración y medio miuón de pesetas le esperan en la meta. Tendrá poco más de 30 minutos para intentar ser el número 1.Santiago Llorente le tenía comida la moral a Antonio Prieto en la época de júniores; y también, José Luis González; incluso, Abascal. Todos le ganaban en el cross. Prieto era un rubiales que llamaba la atención sólo por su ba a estatura (1,58 metros). Hoy, Llorente es uno de los peones de Prieto, y González y Abascal ya no se enfrentan a él porque no están para ser segundones y han elegido otros caminos en la alta competición para llegar a la cumbre. Prieto es el único que ha logrado llegar lo suficientemente lejos en el cross como para estar hoy en disposición de ser el corredor de corredores.
Con 17 años, Prieto corrió su primer mundial júnior. Fue el 24º clasificado, a considerable distancia de Llorente y González. Al año siguiente ganó nueve puestos, pero Llorente y Abascal también habían sido mejores. En 1978 llegó su debú en la categoría sénior y ocupó el puesto 59º, detrás nuevamente de González y delante de Sánchez Vargas, hoy una de las figuras mundiales en 3.000 metros obstáculos.
En la siguiente edición del mundial, al que ganó fue a Abascal; y un año después, 1980, ya se consagró corno el mejor crosista español al ser octavo en la clasificación general y vencer, por fin, a González. En 1981 y 1983 fue quinto del mundo y, entre medias, un 79º puesto a causa de una faringitis inoportuna, pero que no puso freno a su progresión, cuya cima, ser campeón del mundo, intenta hoy alcanzar.
Prieto saldrá en cabeza desde el principio. Con permiso de los etíopes, procurará llevar un fuerte ritmo para descolgar rivales en los últimos kilómetros. Su intención es que todos lleguen al límite de sus fuerzas antes del final y jugarse su baza en un sprint muy largo para ganar en solitario.
Prieto cornenzó a escalar posiciones cuando Treacy, Antipov, Lismont, Muir, Malinowski, Goater, Maminski y McLeod dominaban en el mundo. Y ahora, conuna competencia mucho mayor, Prieto opta a ganar cuando el australiano De Castella (campeón mundial de maratón), el italiano Cova (campeón mundial de 10.000 metros), los alemanes orientales Schíldauer y Kunze (medallas en 5.000 y 10.000 en los mundiales), el neozelandés Dixon (medalla de bronce olímpica en 1.500), el portugués Lopes (subeampeón olímpico de 10.000), el estadounidense Virgin (dos veces campeón mundial de cross) y los incorporados atletas etíopes, keniatas y tanzanos (Kedir, Debele, Bulti, Muge, Shahanga y Barie), que ya han demostrado sus condiciones innatas piara el cross, convierten el título de campeón mundial en el más difícil de conquistar. Sólo falta Alberto Salazar.
En el mundial de cross todos son rivales a batir, dado que las condiciones meteorológicas, las características del terreno y la táctica de carrera lo mismo pueden favorecer a los especialistas de 1.500 que a los corredores de maratón. Incluso no se descarta la sorpresa, algo que no sucede en el atletismo de pista, y por eso figuran como favoritos Antonio Prieto, el estadounidense Pat Porter y el inglés Tini Hutchings, aparte de los ya consagrados.
Récord de equipos
En esta edición, que se celebra en el hipódromo de East Rutherford (Nueva Jersey), se ha establecido un récord de participación con 49 países inscritos. Además de los individuales, hay títulos por equipos y Etiopía es candidato a renovarlo por cuarta vez consecutiva. Presenta como mejores hombres a Kedir (campeón en 1982), Debele (campeón en 1983), Abebe (campeón júnior en 1983), Gelaw (campeón júnior en 1982), Girma (séptimo en 198 1) y Bulti (12º en 1982).
España presenta a Prieto, Jorge García, Adsuara, Esparcia, Polo, Llorente, Alario, Albentosa y Rodríguez para intentar volver a ser el primer país europeo clasificado, lo que supondría ser el cuarto del mundo con mayoría de atletas auténticamente aficionados. En mujeres, con la noruega Greta Waitz en pos de su sexto título mundial, el objetivo es estar entre los diez primeros con Ana Isabel Alonso, Pilar Fernández, Monserrat Abelló, Asunción Sinovas, Mercedes Calleja y Cristina Aguist.
La organización ha costado 90 millones de pesetas y está a cargo del Road Runners Club, que, con 23.000 socios, organiza 120 carreras al año para aficionados, entre ellas la maratón, los seis días de Nueva York y la subida al Empire State. Se prevé que asistirán unos 40.000 espectadores.
3.000 pesetas por ser mujer
Para la Federación Internacional de Atletismo, todo ser humano que haga atletismo es varón hasta que no se demuestre lo contrario. En las competiciones oficiales, la mujer tiene que probar que es tal para que sea admitida su inscripción en la categoría femenina. Por 3.000 pesetas, la organización de los campeonatos mundiales de cross extiende el certificado oportuno a todas aquellas atletas que no lo tengan, Una muestra de saliva es suficiente para que los resultados del análisis sean inapelables.Apenas una docena de atletas ha pasado por el control de sexo. Ninguna española tuvo necesidad de ello. Las seis atletas del equipo ya tuvieron que demostrarlo, algunas con análisis del cabello, en años anteriores. Desde aquel entonces son, oficialmente, mujeres para siempre.
Aún queda otro control que pasar, el del doping, éste ya sin discriminaciones de sexo. Los tres primeros de cada categoría, más diez atletas elegidos por sorteo o a dedo, tendrán que orinar después de sus carreras en presencia del medico oficial de los campeonatos. En esta ocasión habrá que demostrar que no se ha ganado o actuado con ayuda de drogas o estimulantes. No valen los análisis realizados con anterioridad.
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