Giuseppe d'Ascola,
encargado de causas de los santos en el Vaticano, manifestó el martes que no existe un san Valentín que responda a las señas del pretendido patrón de los enamonados, pese a haber 16 santos de ese nombre, alguno de los cuales perdió la cabeza en su día. La aseveración de que san Valentín pueda ser una invención de las multinacionales o el agosto de las floristas no deja de preocupar en algunos ámbitos. La afirmación del represntante de la Iglesia, a las pocas semanas de la desaparición en Italia de los restos del santo prepucio, que se sospecha pueda tener origen eclesial, ante el exceso de piedad que estaba suscitando una reliquia de origen poco claro, hace pensar a algunos adictos a la simbología que, de seguirse desmitificando a este ritmo, el santoral podría quedar seriamente capitidisminuido.
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