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Campaña electoral en el País Vasco

Ataques mutuos entre el PNV y el PSOE, y de Herri Batasuna contra todos los partidos

Los ataques mutuos entre el PNV y el PSOE, y los de Herri Batasuna contra ambos, presidieron el inicio de la campaña electoral en el País Vasco, que contó también con la presencia de un Manuel Fraga prudente en sus declaraciones. Para que nada faltara, fueron detenidos varios militantes del Movimiento Comunista de Euskadi (EMK), cuando colocaban carteles con el eslogan genérico "Que se vayan a la mierda".

El lendakari Carlos Garaikoetxea debutó en Lejona, un pueblo vizcaíno de 18.000 habitantes donde en las elecciones autonómicas de 1980, cada partido obtuvo un porcentaje de votos que resultaría casi idéntico al conseguido por ellos a escala de todo el País Vasco. Garaikoetxea acusó a los socialistas de intentar recortar "desde fuera, porque aquí son una minoría, las cotas de autogobierno mayoritariamente reclamadas por este pueblo".Respecto a la reconversión industrial, el lendakari reprochó al Gobierno central estar haciendo "Juego sucio", planteando "una política unilateral de hechos consumados". "Que nadie se escandalice", añadió Garaikoetxea, "si decimos alto a los planes del Gobierno de Madrid respecto al sector naval y preguntamos qué ha estado haciendo en los últimos años en los astilleros del País Vasco, qué inversiones se han realizado en ellos, por ejemplo".

Herri Batasuna

Xabier Arzallus, presidente del consejo nacional del PNV, que el viernes habló en Azkoitia y ayer lo hizo en Ondarroa, apostó a que "Benegas, cuando vea que no ha salido lendakari, se irá a Madrid". "Ahí se ve", añadió, "quienes son del pueblo y están con el pueblo, y no con el cargo".Miembros de Herri Batasuna y EMK, portando carteles que relacionaba al PSOE con el GAL, se concentraron a media tarde de ayer en las inmediaciones del frontón de Ortuella, en la zona minera de Vizcaya, en el que intervinieron el candidato socialista por Vizcaya, Juan Manuel Eguiagaray, y el diputado por la misma provincia, Ricardo García Damborenea. La crítica a la gestión del Gobierno de Garaikoetxea y a la actitud de los nacionalistas ante la violencia de ETA fueron los ejes de sus intervenciones. En un mitin celebrado en Anzuola, Itziar Aizpurua, candidata número uno de Herri Batasuna por Guipúzcoa, atacó duramente al PSOE, acusándolo de haber "optado por la vía policial, que está de antemano condenada al fracaso". Por ello, "quienes votaron al PSOE en 1982", aventuró la candidata abertzale, "le van a castigar ahora duramente, como se merece". El estatuto de Guernica, "nacido de la Constitución española, no responde a las ansias de soberanía nacional del pueblo vasco porque sólo permite una descentralización administrativa", añadió Aizpurua.

Durante un acto electoral en Vitoria, Mario Onaindia, secretario general de Euskadiko Ezkerra (EE), abogó por el relanzamiento de la Mesa para la paz, y por la vía de la negociación en general. Puso como ejemplo de la "degenaración de ETA", el hecho de que actualmente más del 90% de sus acciones están destinadas, directa o indirectamente, a la obtención de dinero, incluyendo los atentado contra las personas que se niega a pagar el impuesto revoluconario, las voladuras de oficinas bancarias o los secuestros de empresarios". Se preguntó qué tiene que ver todo ello "con el fin proclama lo de la liberación de Euskadi".

Manuel Fraga, que había repar Ído claveles rojos y amarillos ei Vitoria, llegó a Bilbao, paseó por sus calles, se compró una chaqueta en las rebajas, cenó con numerosos periodistas y presidió, durante la mañana de ayer, la primera reunión plenaria de la "comisión interparlamentaria", que agrupa a los representantes de la Coalición Popular en las distintas Cámaras autonómicas de España con su presencia en Bilbao, los 140 parlamentarios apoyaban al candidato a lendakari, Jaime Mayor Oreja. Fraga hablará hoy en Baracaldo, localidad en la que también está previsto un mitin de Herri Batasuna.

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Por otro lado, varios militantes del EMK fueron detenidos y posteriormente puestos en libertad en diversos puntos del país Vasco cuando colocaban carteles en los que se manda "a la mierda" a "los militares golpistas, los torturadores, los pulcros políticos de la guerra sucia, los que destrozan la naturaleza, las mentiras y silencios de la Prensa", y un largo etcétera

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