Se investigan los supuestos malos tratos de un teniente a un detenido en Tocina

La Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla ha abierto una investigación sobre los presuntos malos tratos cometidos por el teniente de la localidad sevillana de Tocina, el pasado 16 de diciembre, al joven obrero agrícola de 19 años Rafael Castro Ruiz, vecino de Los Rosales, que hubo de ser intervenido quirúrgicamente en la residencia Virgen del Rocío, de Sevilla, para extirparle medio testículo (véase EL PAIS de ayer). El muchacho, que acusa al teniente de haberle propinado tres rodillazos consecutivos en el transcurso de un interrogatorio, permanecía ayer tarde detenido en Tocina, a punto de ser trasladado al juzgado de Lora del Río.El propio Rafael Castro afirma que los malos tratos consistieron en rodillazos del teniente de la Guardia Civil, comandante de línea de Tocina. El inicio de la investigación interna por parte de la Guardia Civil, para depurar las posibles responsabilidades, fue confirmado ayer por el teniente coronel al mando de la Comandancia de la Guardia Civil, Rufino Moedas, quien aseguró que esta información de orden interno se llevará hasta el fondo.

Rafael Castro Ruiz, que está acogido al subsidio de desempleo agrario y cuenta con numerosos antecedentes delictivos, había sido detenido el 16 de diciembre como sospechoso de haber participado en el robo de una escopeta de caza, sustraída a un vecino de Los Rosales apodado El treintaduros, ex dueño de una taberna en dicha población. Tras recibir la denuncia de los supuestos malos tratos recibidos, el Juzgado de Instrucción de Lora del Río inició diligencias previas, que todavía continúan.

En la mañana del domingo, el muchacho fue detenido nuevamente por dos miembros de la Guardia Civil de Tocina, en cuyo cuartel volvió a ser interrogado nuevamente sobre el robo de la escopeta, aunque esta vez en presencia de su abogado.

Tanto él como el otro joven detenido por su presunta participación en los mismos hechos terminaron ayer sus declaraciones ante la Guardia Civil, por lo que han quedado internados en el depósito carcelario municipal de Tocina a la espera de que un furgón de la Guardia Civil, procedente de Sevilla, les traslade ante el juez de instrucción de Lora del Río.