Tres jóvenes denuncian su detención ilegal por dos supuestos guardias civiles
Tres jóvenes madrileños presentaron el pasado día 13, según se ha sabido ahora, una denuncia en la comisaría de policía de la calle de la Luna por presuntos delitos de robo, coacción y detención legal por parte de dos personas que se identificaron como guardias civiles. Un portavoz de la Dirección General de la Guardia Civil ha informado que se investiga la identidad y los motivos del comportamiento de los dos supuestos guardias.Hacia las dos de la madrugada, cuando José Antonio Matías, empleado bancario de 27 años; su hermano Máximo, de 25, y un amigo común llamado Carlos, de 22, se dirigían a un pub situado en la esquina de la plaza del Dos de Mayo con la calle de Velarde, fueron abordados en la puerta de este local por dos individuos que llevaban una pequeña bola de hachís y solicitaron a los jóvenes papel de fumar, lo que les fue suministrado.
En el pub tomaron juntos unas cervezas. Entre los dos grupos se entabló una discusión, que continuó en la plaza del Dos de Mayo. "En un momento determinado", relata José Antonio Matías, "el más joven de los dos sacó una pistola automática, dijo ser guardia civil, exhibió un carné donde ponía algo parecido y nos pidió la documentación". José Antonio Matías le entregó su carné de identidad y 2.000 pesetas. Luego, en un momento de confusión, logró subir a un taxi y dirigirse hasta la Jefatura Superior de Policía, en la Puerta del Sol, desde donde fue enviado un coche patrulla. Cuando el zeta y Matías llegaron a la plaza del Dos de Mayo ya no se encontraban allí ni los amigos ni los supuestos guardias.
Según relataron Máximo Matías y Carlos, fueron trasladados en un coche hasta la Dirección General de la Guardia Civil, donde permanecieron una media hora. A Carlos llegaron a meterle en los calabozos durante unos minutos, le enseñaron una papelina de heroína y le dijeron que iban a denunciarle por llevarla encima.
