Manuel Montes, inesperado líder del Open de España

El español Manuel Montes, de 33 años, es el nuevo líder del Open de España de golf con 136 golpes, 8 bajo par, tras finalizar el segundo recorrido del torneo con 66 golpes. La partida disputada por el jugador español, Eamonn Darcy -líder del primer día- y Tonny Johnstone, el más flojo de los tres, hizo olvidar la desafortunada actuación que tuvo ayer Severiano Ballesteros, en lo que se podría llamar su peor día en un torneo español desde que diera el salto a la fama. Montes estuvo sensacional durante todo el recorrido. Se mostró seguro en las salidas y en el putt (golpe final en busca del hoyo) y consiguió seis birdies.

Ayer se vivió una jornada emocionante en el club de golf Las Brisas, en Marbella, donde la brillante actuación de Montes acabó contentando a los aficionados españoles que siguieron desesperados la actuación del gran favorito, Severiano Ballesteros. Manuel Montes, clasificado el año pasado en el puesto 58 del ranking, había finalizado el primer día con 70 golpes. El jugador del club de golf La Moraleja de Madrid no ha ganado todavía un torneo del circuito europeo, aunque estuvo a punto de hacerlo en el open Sanyo disputado el año pasado en Sant Cugat, del que fue líder las tres primeras jornadas. Montes, natural de Cádiz, cree que "el liderato me viene un poco pronto, pero si juego tan bien como hoy podría mantenerlo. Lo único que puede influir negativamente en mi rendimiento es que no tengo experiencia para ganar torneos". En un momento del juego, Montes dijo a su caddie que podía batir el récord del campo en poder del norteamericano Johnny Miller, con 65 golpes. Tuvo oportunidad, pero no lo consiguió. Los seis birdies de Montes se produjeron en los hoyos 1, 2, 3, 12, 15 y 16.

El mal día de Ballesteros

El segundo clasificado del torneo es el irlandés Eamonn Darcy, con 138 golpes. El segundo español mejor clasificado es José María Cañizares, con 141. Manuel Calero tiene 142 y el joven mallorquín Jesús López Moreno, 143 golpes. El aficionado José María Olazábal tiene 144, mientras que Manuel Piñero, 70 -ayer, suma 146.

Severiano Ballesteros tuvo un día triste. Esta, vez sólo pudo quejarse de sí mismo y no del público, que le acompañó como siempre, ni de los fotógrafos que ayer casi dejaron en el olvido a la estrella española. La organización, para curarse en salud y no dar más que hablar a Severiano, se reunió con una mínima representación de fotógrafos y les volvió a explicar las normas preliminares para disparar sus máquinas en el terreno de juego. Además de esta reunión, en la que se usó el nombre de Ballesteros como cebo para que asistiera el mayor número de reporteros gráficos, los organizadores adoptaron la drástica medida de prohibir la entrada al campo de todo aficionado que llevara cámara de fotografiar o de vídeo. A cambio, ofrecía a todos los aficionados un servicio para, guardar sus máquinas y un fotógrafo de la organización para hacer las fotos para todos aquellos que quisieran tener un recuerdo del campo y del open.

Ballesteros jugó para hacer birdie en los hoyos 1, 2, 6 y 8,pero se tuvo que contentar con el par porque ayer su putt no estuvo tan inspirado como el primer día de torneo. En esta primera vuelta, disputada bajo un intenso calor y entre la desesperación del público que veía cómo su ídolo perdía poco a poco sus mejores ocasiones, Seve sólo consiguió birdies en los hoyos 3 y 9, pero hizo bogey en el 5 y en el 6.

La segunda vuelta fue aún más desesperante. El doble campeón del Master falló como nunca se le había visto en España. En el hoyo 12, de 468 metros y de par 5, tuvo la negra. Su segundo golpe quedó al borde del agua. Se vio obligado a meterse en el agua y golpear en una posición muy difícil que hizo que su golpe fuera al bunker, para salir del bunker necesitó dos golpes más y luego dos putts más para acabar. En el 13 volvió a ir al bunker y cometió bogey. Tras hacer un birdie en el 17, falló en el último hoyo del recorrido, donde también se tuvo que descalzar para poder dar un golpe a su bola medio metida en el agua. En total hizo 75 golpes, 3 sobre el par, para un global de 143, que le sitúan a siete golpes de Manolo Montes. Ayer Ballesteros sufrió.