La quema de banderas españolas, calificada de "provocación" por el PNV, PSOE y EE

Los partidos vascos PNV, PSE-PSOE y Euskadiko Ezkerra coincidieron ayer en definir como "provocación premeditada" la quema de una docena de banderas españolas, durante las manifestaciones que tuvieron lugar la noche del martes en diferentes puntos del País Vasco. Tres personas, entre ellas un muchacho de 14 años de edad, fueron detenidas en San Sebastián, acusadas de haber tomado parte en los incidentes. Las manifestaciones habían sido convocadas por KAS, principal fuerza de Herri Batasuna, para conmemorar el denominado Gudari Eguna (Día del soldado vasco) en el octavo aniversario del fusilamiento de dos miembros de ETA y tres del FRAP.

Ayer mismo, el diario nacionalista Deia, vinculado al PNV, calificaba la quema de las banderas de "actos vandálicos y antidemocráticos" en un editorial que acusa a los autores de estos hechos de "provocar al pueblo vasco y alimentar la tensión de los grupos más reaccionarios próximos al golpismo". Deia denunciaba asimismo la denominación Gudari Eguna que los grupos convocantes de las manifestaciones dieron a la jornada. "Todo Euskadi sabe", afirma Deia, "que los auténticos gudaris lucharon con honor y su calidad humana fue reconocida por sus adversarios".El dirigente del PNV Gerardo Bujanda manifestó ayer que la gran mayoría de los vascos se siente ofendida por la quema de las banderas, acto que definió con expresiones como "provocación involucionista, barbarie antidemocrática y muestra de intolerancia. Los vascos, que hemos soportado durante muchos años la prohibición y hasta el ultraje de la ikurriña, sabemos que los símbolos representan algo para la gente; la quema de las banderas españolas es una acción todavía más trascendente, puesto que constituye un agravio para muchas más personas".

Preocupación del PNV

Gerardo Bujanda se mostró preocupado por los juicios que estas acciones pudieran producir fuera del País Vasco. "Los que han quemado las banderas quieren eliminar la posibilidad de que el pueblo vasco sea escuchado fuera; quieren la involución, la marcha atrás. Estoy convencido de que estas acciones fueron preparadas deliberadamente con el único afán de provocar; no puede ser casualidad que casi a la misma hora sean quemadas una docena de banderas españolas en sitios diferentes".El dirigente del PSE-PSOE Enrique Casas indicó que la quema de las banderas supone un ataque al pueblo español y al sistema democrático, además de "una clara y nada novedosa provocación por parte de sectores minoritarios que practican y aplauden la violencia". Casas considera correcta y coherente la política desarrollada en este terreno por los gobernadores civiles del País Vasco, política que ha situado ante los tribunales de justicia a concejales de Herri Batasuna acusados de injuriar a la bandera española.

Un portavoz de Euskadiko Ezkerra asoció la quema de las banderas al "intento permanente de sectores de Herri Batasuna vinculados a ETA Militar de mantener una tensión que les permita justificar sus planteamientos políticos ficticios. El paro, el desarrollo del autogobierno y las medidas para paliar los efectos catastróficos de las inundaciones no tienen nada que ver", dijo, "con las guerras de banderas, un problema artificial que encuentra eco en los medios de comunicación, pero que no conecta con la gran mayoría de la población vasca".

Las siete personas detenidas en la noche del martes en Pamplona, como consecuencia de los violentos incidentes que se produjeron en esta ciudad, fueron puestas ayer tarde en libertad provisional. Tres de los detenidos tuvieron que abonar una fianza de 25.000 pesetas. Estas siete personas son Rafael Lucio Lizaso, Juan Pablo Olaz, Celia Uriz, Álvaro Ilundain, Miguel Aguirrezabala, Julio Palacios y Jesús Suescun, informa Carmelo C. Ridrujeo.