Personajes de televisión

Quiero protestar desde aquí por el gran desmán que se ha cometido con la extraordinaria cómica (además, muy guapa) Beatriz Carvajal, botándola del engendro televisivo denominado Un, dos, tres. El motivo, por visto y oído, ha sido, ni más ni menos, que sus actuaciones herían la sensibilidad del colectivo nacional de tartamudos. Hasta aquí, todo parecería correcto; sin embargo, no dejo de preguntarme por qué no tiran por un barranco al señor Bigote Arrocet, dado que sus intervenciones en dicho programa alejan, de forma preocupante, toda posible recuperación de los subnormales profundos.El mismo tratamiento deberia emplearse con el cómico Raúl Sender, ya que sus parodias deben sacar de sus casillas a todos los maricas honestos de este país. Por último, no sé a qué están esperando en TVE para arrojar por los acantilados de Dover a la señora suramericana que monta su ridículo chou con el único propósito, conseguido semana tras semana, de llegar a lo más profundo de los corazones de todos los tontos de baba nacionales.

Está visto y comprobado. Aquí siguen campando por sus respetos, aún, toda laya de monjiloides, frailunos, sacristaneros, meapilas, moralistas de vía estrecha, hipócritas y gilis de todos los calibres. Si Quevedo pudiere darse un garbeo por estos pagos se quedaría alucinado. /