Barry Sheene, con problemas de tornillería en una pierna

El piloto motociclista británico Barry Sheene será operado de nuevo en su pierna Izquierda, gravemente lesionada en su caída cuando rodaba a más de 200 kilómetros por hora, en el curso de unos enfrenamientos para el Gran Premio de Gran Bretaña de Motociclismo.

Algunas de las 26 tuercas y tornillos aplicados en su pierna parecen haberse aflojado, según revelaron las últimas radiografías de su pierna. Sheene, sin embargo, intentará retrasar al máximo la operación, para evitar una interrupción en su temporada.Barry Sheene estuvo a punto de perder la vida hace unos meses, cuando cayó con su moto en el curso de unos entrenamientos. Los médicos lograron salvar su vida, aunque, según sus informes el ex campeón del mundo nunca más podría volver a correr. Por que, para poder rehacer la pierna izquierda de Sheene, prácticamente triturada, el doctor Nigel Cobb y su equipo de médicos tuvieron que montar un complicado entramado metálico interno, unido por 26 tuercas y tornillos.

La escasa movilidad de la pierna una vez reconstruída, así como la anatomía del piloto británico, muy castigada por los accidentes -años atrás, en Daytona, había sufrido otro accidente en el que según él mismo, se rompió todo- parecían imposibilitar una recuperación deportiva para Barry Sheene. Pero la voluntad del piloto echó por tierra las previsiones médicas.

Ahora, sin embargo, Barry Sheene tendrá que ser operado nuevamente. Esta vez, por un problema de tornillería. Porque dos de las tuercas que sujetan otros tantos tornillos dentro de su pierna izquierda parecen haberse aflojado. Lo suficiente como para que el doctor Nigel Cobb tema por una pérdida de eficacia al desenroscarse -caerse es imposible-, y haya decidido volver a intervenir quirúrgicamente al piloto.

Sheene, de temperamento muy optimista, espera no tener que interrumpir su actual temporada. Su objetivo es retrasar al máximo la operación porque, según él, una de las tuercas está fijada por un tendón, por lo que resulta muy difícil que se afloje más. El simpático piloto británico prefiere esperar al final de la temporada, aunque sea a costa de soportar los dolores que le produce el problema de tornillería y a costa, también, del riesgo a que pueda desmontársele el complejo entramado metálico que sostiene su pierna.