Murió uno de los policías heridos en el choque con un coche robado en Zaragoza

José María Nieto Alda, uno de los tres policías nacionales que resultaron heridos en el transcurso de la persecución de un coche robado ocupado por cuatro jóvenes, murió en la noche del lunes a causa de las heridas sufridas. Uno de los cuatro jóvenes, Pedro Santiago Casado García, alias El Gorila, que conducía el automóvil, murió en el acto, dos de los ocupantes resultaron heridos y un cuarto consiguió huir.El suceso ocurrió a las 3.30 horas del lunes cuando el turismo matrícula Z-5361-N, que momentos antes había sido robado a su propietario, circulaba a una velocidad de 170 kilómetros hora, según fuentes policiales, ocupado por cuatro delincuentes habituales. A la altura de la vía de la Hispanidad, el coche cambió bruscamente de calzada y fue a estrellarse contra un coche patrulla de la Policía Nacional que circulaba en sentido contrario.

Este extremo no ha sido aclarado suficientemente, ya que algunas fuentes atribuyen la persecución al mismo coche patrulla que resultó accidentado y otras a un tercer vehículo que venía persiguiendo al robado. En la versión oficial de la policía no se habla en ningún momento de persecución.

José María Nieto Alda, el agente que resultó muerto, era natural de Godojos (Zaragoza), estaba casado, tenía dos hijos y llevaba 10 años de servicio en el cuerpo. Los otros dos policías, que siguen internados en estado muy grave, son los cabos primero Carlos Rubio y Ernesto Latorre. Intentaron huir del vehículo robado José Luis Pescador, de 18 años, Javier Soler Quílez, de 19, y Francisco José Ballejo Fernández, de 19. Los dos primeros fueron detenidos y trasladados al hospital, el cuarto con siguió huir y se desconoce su paradero.