El Tribunal Constitucional ordena al Ayuntamiento reponer en sus cargos a los cinco ex concejales expulsados del PCE

El alcalde de Madrid, Enrique Tierno, recibió ayer la sentencia del Tribunal Constitucional por la que se ordena que el Ayuntamiento y la Junta Electoral adopten las medidas necesarias para reponer en sus cargos a los cinco concejales expulsados del PCE en febrero de 1982. En la tarde de ayer se celebró una reunión entre el secretariado del comité provincial del partido y el grupo de concejales comunistas en la que se criticó la sentencia, aunque manifestando, de entrada, el acatamiento total de la decisión. Para esta mañana está convocada otra reunión entre los grupos de concejales comunista y socialista, a fin de estudiar la situación en que queda el Ayuntamiento a consecuencia del fallo del alto tribunal.

El Tribunal Constitucional dictó su sentencia con fecha 21 de febrero, la envió al Ayuntamiento el 25 del mismo mes, y tuvo su entrada en el registro general municipal el 1 de marzo. La sentencia, a la que tuvo acceso EL PAIS, es prácticamente idéntica a la dictada con motivo del recurso de amparo interpuesto por el concejal socialista de Andújar expulsado del PSOE, si bien contiene algunas concreciones. El fallo consta de los siguientes cuatro puntos textuales:1º. Declarar la nulidad del acuerdo de la Junta Electoral de Zona de Madrid por el que se tuvo por cesados en su cargo de concejal a los recurrentes y se proclamó a sus sustitutos, con los efectos que se determinen en el último fundamento de esta sentencia.

2º. Declarar el derecho de los recurrentes como representantes libremente elegidos por los vecinos de Madrid a ser repuestos en el cargo de concejal que desempeñaban al ser expulsados del partido del que formaban parte en el momento de su elección.

3º. Ordenar a la Junta Electoral de Zona y al Ayuntamiento de Madrid que adopten las medidas necesarias para el restablecimiento de los recurrentes en la plenitud de sus funciones.

4º. Desestimar el recurso en el resto de sus pretensiones.

El texto de la misma señala textualmente: "Como conclusión de este punto (se refiere al cuarto de los fundamentos jurídicos en que se apoya la sentencia) hay que señalar, por tanto, que el precepto del artículo 11. 7 de la Ley de elecciones Locales viola, en la persona de los recurrentes, el derecho de los ciudadanos a participar en los asuntos públicos mediante representantes libremente elegidos y el de los representantes mismos a mentenerse en sus funciones cuando, por haber sido expulsados de él, dejen de pertenecer al partido que los propuso como candidatos".

La sentencia contó con el voto en contra de tres de los doce magistrados que componen el Tribunal constitucional; concretamente de los magistrados Angel Latorre Segura, Manuel Díez de Velasco y Luis Díez Picazo, quienes, sin entrar en pronunciamientos sobre la constitucionalidad del artículo 11.7 de la Ley de Elecciones Locales, estimaron que no se había lesionado derecho alguno de los recurrentes, por lo que procedía la desestimación del recurso de amparo.

Los partidos, "indefensos"

El secretariado provincial del PCE se reunió ayer con el grupo de concejales comunistas, cinco de los cuales -Adolfo Pastor, Narciso Torrente, Francisco Herrera, Julio Setién y Fernando Clavo-, sustitutos de los expulsados, abandonarán imediatamente sus cargos, según declaró ayer a este periódico Adolfo Pastor. Al término de la reunión se redactó un comunicado en el que el PCE afirma su acatamiento total de la sentencia, al margen de disentir de su contenido. Pastor declaró ayer que la sentencia deja a los partidos políticos "indefensos" respecto a las futuras actuaciones de sus militantes elegidos para cargos públicos.Hoy se celebrará otra reunión entre los grupos de concejales socialista y comunista. Dado que los cinco expulsados y repuestos en sus cargos no ingresarán de nuevo como concejales comunistas -dos de ellos son ya militantes socialistas y se integrarían en el grupo de concejales de su partido-, el grupo comunista queda reducido a tres personas, cuando su parcela de poder municipal abarca, hasta hoy al menos, cuatro delegaciones y cinco presidencias de juntas municipales de distrito. Los comunistas plantearán al PSOE su deseo de mantenimiento del pacto municipal y la continuidad en sus competencias, aunque eso suponga que un solo concejal de los tres que quedan, por ejemplo, tenga que asumir dos delegaciones y una junta de distrito.

Si todos los expulsados siguen ahora en sus cargos, la corporación madrileña quedaría formada por veinticuatro concejales socialistas, tres comunistas, dieciseis "centristas" y tres independientes.