Pugna por el control del Partido Social Demócrata portugués
La batalla política en el seno del Partido Social Demócrata portugués se limita a un duelo entre los denominados notables -con inclusión de relevantes figuras del aparato del partido- y el ala izquierda -compuesta por sectores de la juventud y el sindicalismo socialdemócrata- a escasos días de la reunión general del próximo viernes, que debe zanjar, aunque sea transitoriamente, la crisis abierta en la fuerza política que encabeza el Gobierno luso desde hace tres años.Los barones pretenden esencialmente un cambio de imagen del partido cara a las elecciones de abril próximo, y su principal objetivo es provocar la expulsión de Francisco Pinto Balsemao de todos sus cargos dirigentes, para sustituirle por un nuevo líder capaz de reconquistar la derecha del electorado de Alianza Democrática.
Los segundos, también llamados grupo de los 44, aunque críticos en relación con Balsemao, se niegan a hacer del presidente del partido el chivo expiatorio de los problemas del Gobierno, de la coalición y del PSD, y proponen, una modificación profunda de la táctica y de la estrategia política, reorientada hacia el centro izquierda y abierta a un futuro diálogo con los socialistas.
Después de muchas dudas, los barones han decidido presentar un equipo dirigente alternativo a Balsemao, cuya figura es Carlos Mota Pinto.
Solución colegiada
La negativa de este último a asumir todos los riesgos políticos del enfrentamiento, con la disciplina de no poder dedicar más que una parte de su tiempo a la vida política, obligó a los notables a idear una solución colegiada, dividiendo las responsabilidades entre un presidente y tres vicepresidentes: Mota Pinto, Eurico de Melo (eterno rival de Balsemao) y dos elétnentos encatgados de asegurar la continuidad entre la anterior y la nueva dirección.El grupo de los 44 se propone otorgar, el poder de dirección al presidente de la comisión política, y el presidente del partido, que dejaría de acumular los dos cargos, ostentaría la máxima representación del partido y el área de las relaciones exteriores. Luis Fontoura, actual secretario de Estado para la Cooperación, sería el candidato de los 44 a la presidencia de la comisión política, y Balsemao sería el hombre indicado para la presidencia del partido.
Aunque no intervenga directamente en la batalla, Balsemáo no está al margen de la contienda: el presidente del Gobierno autonómico de Azores, Mota Amaral, consiguió reunir un grupo de defensores del actual líder, con posiciones próximas, pero no coincidentes, con las del grupo de los 44, y devolvió a Balsemao una capacidad de maniobra que parecía haber perdido definitivamente.
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