José Andrés del Valle,
el novicio de la orden carmelita de la Santa Faz -más conocida en el mundo por la orden de El Palmar de Troya o la del papa Clemente-, parece definitivamente liberado de reingresar en la extraña secta. Después de haberse automutilado el pene el pasado fin de semana, salió ayer de Sevilla, vía Miami, donde le esperan sus familiares para tratar de rehacer su vida, según informa José Aguilar. Del Valle, integrante de una familia de exiliados cubanos muy religiosa, ingresó en El Palmar de Troya tras un fracaso sentimental y, varios meses después, saltó a la actualidad por haberse cortado los testículos y producido otras heridas en el pene en un rapto de locura, que se repitió la semana pasada, mientras disfrutaba de un permiso concedido por los médicos que le atendían en el hospital Psiquiátrico.
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