Guerra abierta entre el Comité Olímpico norteamericano y la Federación Internacional de Atletismo

El enfrentamiento entre el Comité Olímpico de Estados Unidos, USOC, y la Federación Internacional de Atletismo, IAAF, es ya una guerra abierta. La IAAF, que preside Primo Nebiolo, redactó ayer una nota en la que desaprueba con toda firmeza la decisión del USOC de permitir a Reinaldo Neheremiah, recordman mundial de 110 metros vallas, participar en pruebas nacionales, pese a ser jugador de fútbol americano profesional.

, El representante de Bulgaria en la reunión de comités olímpicos nacionales denunció ayer ante el COI la decisión norteamericana que atenta gravemente, dijo, contra la regla 26 del olimpismo, la debatida norma que regula el amateurismo. Aunque la IAAF, en su pasado congreso de Atenas con motivo de los Campeonatos de Europa, abrió prácticamente la mano en el tema del dinero cobrado por los atletas de élite en las distintas reuniones, existe gran malestar por esta iniciativa tomada por el USOC. Medios de la IAAF no descartaron que en el futuro se pudiese tomar esta medida, pero no en la actualidad, y desde luego, en caso de hacerlo, no puede partir la iniciativa de un comité olímpico.En círculos atléticos y deportivos norteamericanos se ha señalado que William Simon, presidente del USOC y antiguo secretario del Tesoro con Nixon, necesita hacerse publicidad a toda costa, porque incluso se ha visto desplazado al no intervenir prácticamente en la organización de los Juegos de Los Angeles. Simon contestó al delegado búlgaro con el razonamiento de que América es diferente, y que el tema lo podría haber decidido una corte federal; pero la IAAF se plantea ya la posibilidad de suspender a la Federación de Atletismo de Estados Unidos, TAC, por permitir la vuelta de Nehemiah el próximo viernes en los Milrose Games, de Nueva York. La puerta de un atletismo peligroso se ha abierto con el caso Nehemiah. Mientras en Europa sería más difícil -al menos a alto nivel-, en Estados Unidos existen baloncestistas profesionales o jugadores de fútbol-rugby como el citado que perfectamente competirían en atletismo con la elite. Antes que Nchemiah ya se hicieron profesioriales figuras como Jim Thorpe y los recortiman mundiales de 100 metros Bob Hayes y Jim Hines, este último aún poseedor de la plusmarca desde México-68 con 9.95. En Europa, o en el resto del mundo, se daría más bien carácter oficial a la trampa contraria. A cualquier atleta conocido se le podría poner una raqueta en la mano o un balón en los pies y pagarle abiertamente, aunque no fuese especialmente bueno. Pero sí sería un magnífico gancho publicitario. Y si hubier un Gento de sus buenos tiempos podría aspirar a ser el mejor en los 100 metros. En realidad, la FIFA con tal de que no hayan jugado copas del mundo quiere de jar jugar a profesionales, lo cual es otro tema a resolver. El 14 de febrero, en Lausana, habrá una reunión entre la FIFA y el COI para tratar otro paso delicado en el olimpismo.

El conformismo ante las pro mesas particulares hechas a muchos delegados, la diferencia de objetivos puramente políticos entre los casi 150 participantes y la posibilidad siempre cumplida de manipulación en una asam bleá, obviaron el problema económico que aún lo será para bas tantes países pobres de cara a los Juegos Olímpicos de Los Angeles-84. La rebaja de diez dólares de 45 a 35, en el costo diario por atleta y la decisión del COI de asumir, en lugar de los comités olímpicos nacionales, con parte de las exigencias del comité organizador, fueron suficientes para acallar las protestas de días pasados Sin embargo, los Juegos de la 23ª Olimpiada serán los más costosos de la historia para todos, al haberse aumentado un 75% las cifras anteriores. El delegado soviético, Víctor Ivonin, no dejó se señalar que un dinero de los CON, trece millones de dólares (más de 1.500 millones de pesetas), parte del contrato de televisión de los Juegos, está congelado en bancos norteamericanos.

El acuerdo entre el COI y el LAOOC, el gran bálsamo para tranquilizar a los CON, consta de seis puntos. En el primero, además de confirmar la cifra de 35 dólares, se dice que sólo será para los días en que el atleta o delegado esté acreditado; en el segundo, se confirma que el COI pagará la estancia de seis delegados y un depósito adelantado al 1 de marzo de 1984. Es decir, unos cuatro meses y medio antes del comienzo de los Juegos, de 4.200 dólares (medio millón de pesetas) para delegaciones inferiores a cincuenta personas. Si superan esa cifra pueden pedir al COI la misma suma adelantada, pero ya deberán abonar los 35 dólares diarios por cada atleta por encima de esa cantidad.

Habrá siete millones de entradasdisponibles, a una media de dieciocho dólares de precio (más de 2.000 pesetas), aunquer Usher dijo que tres millones de ellas costarán menos de diez dólares. El LAOOC sólo tratará de su venta directamente con los Comités Olímpicos Nacionales.