Presta declaración el joyero británico, sospechoso de estafar 600 millones de pesetas en su país
El joyero británico Robert Chatwin, de 43 años, detenido el sábado pasado en un hotel de Valencia, prestó ayer declaración, a lo largo de una hora, en el Juzgado de Primera Instancia de Denia (Alicante) por presunto delito de estafa. La Prensa británica recogía estos días con amplios reportajes la desaparición de este joyero, que dirige una red de joyerías desde Birmingham, con joyas valoradas en seiscientos millones de pesetas. Sin embargo, no existe todavía ningún cargo formalizado por la jurisdicción británica contra Chatwin.
A las nueve de la mañana de ayer el joyero había sido citado a declarar en Denia, lugar de la costa alicantina donde pensaba fijar su residencia. Joyeros procedentes de Inglaterra se personaron para proceder a identificar algunas de las alhajas encontradas en su poder, y los representantes de una firma valenciana de importación y exportación, que quiere guardar el anonimato, presentaron una denuncia por presunta estafa. Hace dos meses formalizó esta firma con Chatwin una operación de joyas de oro y plata. Cuando el efecto fue devuelto por el banco National Westminter, la exportadora valenciana reclamó, recibiendo por respuesta que su cliente había desaparecido.Un portavoz autorizado de la Jefatura Superior de policía de Valencia, cuya Brigada de policía Judicial realizó la detención, aseguraba que el caso permanece oscuro, pero que resulta dificil por el momento establecer la existencia de un delito manifiesto. "Nosotros sólo mandamos al juzgado un sospechoso, jamas a un imputado", señaló a este respecto.
El portavoz comentó, por otro lado, que después de la expectación creada a raíz de la detención "el caso ha quedado en: nada, como la gaseosa, como un terrón de azúcar". Chatwin fué detenido el pasado sábado a las 9 horas y Puesto a disposición del juzgado de Denia la noche del lunes.
No obstante, ayer llegaron a Denia varios joyeros ingleses, que deseaban reconocer las joyas encontradas en el chalé del detenido, ya que aseguran haber efectuado a Chatwin unas importantes ventas, cuyo pago aún no ha sido satisfecho. Chatwin, de 35 años de edad, es propietario 'de una cadena de seis establecimientos de joyería, y su base principal estaba en Birmingham. En los últimos meses había efectuado compras importantes, por valor de unos tres millones y medio de libras esterlinas.
El juez, tras tomar declaración en el sumario, tiene tres días de plazo para dictar su ingreso en prisión o su libertad, segun la conclusión alcanzada despues de la investigación. Por el momento no se ha dado a conocer la decisión del juzgado de primera instancia. El caso podría quedar tipificado, según version de la defensa del joyero británico, como entrada ¡legal de alhajas y oro, que se resuelve pagando el canon correspondiente a la aduana española.
Cincuenta millones en joyas
Este presunto autor de un robo de joyas en el Reino Unido, por valor de seiscientos millones de pesetas, pretendía fijar su residencia en la casa de un amigo suyo en la costa de Denia, donde la policía encontró alhajas valoradas en cincuenta millones de pesetas. Chatwin. niega haberlas traido desde Inglaterra, y por otra parte no se ha podido establecer si pertenecen a las reclamadas por los joyeros británicos que se consideran estafados.No se ha recibido en España ninguna reclamación judicial procedente de Gran Bretaña. Sin embargo, la policía española, en colaboración con la Interpol, siguió durante varios días la pista de Chatwin, por el gran eco que había adquirido su huida a España en la Prensa del Reino Unido.
Se dió con su paradero al delatarle un conserje del hotel de Valencia donde residía, que vió su foto y leyó las informaciones del caso en un periódico de la ciudad. Su entrada en España tuvo lugar el 6 de enero a bordo de su barco privado que debió ser remolcado hasta de Santander por avería. Desde allí se trasladó a Valencia en una caravana.
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