'Memorias de una doncella', otra obra de Jean Renoir

André Bazin, el prestigioso crítico francés a cuya sombra aprendieron a conocer el cine los vehementes realizadores de la nouvelle vague, confiesa en su libro sobre Jean Renoir el error que cometió la primera vez que contempló Memorias de una doncella. En 1946, fecha de realización de la película, se encontraba Renoir en Hollywood, y aunque a esa etapa pertenecen algunos de sus títulos más importantes, creía Bazin que no era posible trasladar a Estados Unidos el clima de la novela de Mirbeau: "Por aberración mental, ausencia de sentido autocrítico o un peligroso gusto por la paradoja, Renoir ha rodado, precisamente en América, el tema que más cerca tenía del corazón y que no puede entenderse fuera de Francia".Argumentaba que "este drama sobre la ambición no tiene así ninguna raíz, ni una visión de futuro, ya que el problema social de los criados no existe en USA, si no es a través de los negros". Se arrepintió pocos años después cuando tuvo ocasión de contemplar de nuevo la película. En su nueva opinión, Memorias... era uno de los más inteligentes filmes de Renoir.

Renoir no fue muy explícito en sus memorias. Mientras dedicó gran atención a su obra anterior, El hombre del sur, y a una de las inmediatas siguientes, El río, sólo cita, a propósito de Memorias de una doncella, a Burguess Meredith, el espléndido actor que, fue, además, coguionista.

Memorias de una doncella se emite hoy a las 21.35 horas por la primera cadena.