Los GRAPO habían anunciado una tregua

Los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre habían anunciado una tregua en la lucha armada, tras la victoria electoral del PSOE, por medio de un comunicado enviado a varios medios informativos. En el mismo decían también que esta medida, decidida "como un signo de disposición al diálogo" con el nuevo Gobierno, podría romperse si se diera alguna "escalada criminal contra las organizaciones antifascistas o si se hiciese caso omiso de las exigencias de las masas populares".Entre las condiciones que el citado grupo terrorista pretendía imponer al Gobierno socialista figuraban "la salida de España de la OTAN, la puesta en libertad de los presos políticos antifascistas, dar solución a las aspiraciones de los pueblos nacionalistas oprimidos por el Estado español, establecer un régimen de verdaderas libertades políticas y sindicales y depurar del aparato del Estado a elementos fascistas".

Esta tregua de los GRAPO se producía siete años después de la aparición pública de dicha organización, tantas veces oficialmente desarticulada como extraña y sospechosamente reconstituida en momentos clave de la transición democrática.