La patronal holandesa acepta una reducción de la jornada laboral

La patronal y los sindicatos holandeses han puesto una nueva piedra en el edificio de las relaciones laborales. Por primera vez en la historia de los países miembros de la Comunidad Económica Europea (CEE), los empresarios de los Países Bajos han aceptado el principio de reducción de la jomada laboral, que constituye una de las principales reivindicaciones de los trabajadores europeos.

La patronal holandesa ha sorprendido a sus colegas de la CEE, que mantienen desde hace tiempo una negativa sistemática a este tipo de negociaciones. Pero los empresarios europeos no han sido los unicos. Los sindicatos de los Países Bajos han modificado también sustancialmente sus propuestas y han aceptado, a cambio de lograr un paso hacia la tan deseada semana de 35 horas, que la reducción de la jornada laboral en un 2,5% vaya acompañada de la renuncia por parte de los sindicatos al aumento del 2,06% de los salarios, previsto para enero próximo. La patronal, además de reducir el horario de trabajo, se compromete a crear nuevos empleos y a poner en práctica una serie de medidas para promover la contratación de menores de veinticinco años.

Los empresarios afirman que es mejor reducir jornadas que recurrir al cierre temporal de las fábricas. Los trabajadores, por su parte, señalan que han dado muestras de su solidaridad con los parados -el 11,3% de la población activa- y que siempre que se mantenga un nivel de vida adecuado para todos están dispuestos a aceptar sacrificios. Numerosas encuestas demuestran que los jóvenes trabajadores holandeses prefieren tener más tiempo libre, aunque ello suponga también renunciar parcialmente al incremento automático de sus ingresos, según el índice del coste de la vida.

El pacto, que tiene las características de un acuerdo marco y que debe ser discutido ahora a nivel sectorial, no evitará la huelga de los servicios públicos convocada por los sindicatos para protestar por la política económica del Gobierno de centro derecha.