Elena de Borbón,

la hija mayor de los Reyes de España debutó ayer como amazona en pruebas oficiales, en el Club Deportivo Militar de la Dehesa. Participó en el premio que lleva el nombre de su hermano el Príncipe de Asturias y que es una de las pruebas más importantes para jinetes de categoría juvenil. La reina Sofía y la infanta Cristina presenciaron la primera actuación pública de doña Elena.La infanta montó a Gaitán, un caballo de ocho años con el que realizó una excelente actuación y a punto estuvo de pasar a la final que se disputará hoy. Los nervios le jugaron una mala pasada a doña Elena que cuando tenía prácticamente asegurada su clasificación se olvidó del recorrido por unos instantes y perdió unos valiosos segundos que le hicieron sobrepasar el tiempo concedido por el jurado de pista para cubrir los obstáculos. A pesar de ello, la actuación de doña Elena fue magnífica, ya que no tiró ninguno de los diez obstáculos del recorrido. En varios instantes, la infanta tuvo que usar el látigo para solicitar toda la atención de su caballo.

Gaitán es un ejemplar muy complicado de montar incluso para su jinete habitual, el teniente García Barona, que se lo cedió a doña Elena para que participara en esta prueba. "La infanta lo ha montado muy bien, a pesar de que sólo ha entrenado con él doce días, tiempo casi imposible para que un jinete y su montura se acomplen", dijo después de la prueba el teniente García Barona.

La Reina siguió desde la tribuna, con gran atención, el desarrollo de la prueba y aplaudió con gran entusiasmo la actuación de su hija. Es habitual que doña Sofía presencie las pruebas en las que participa doña Elena. La infanta Cristina, que también es aficionada a la hípica, acompañó a su madre al Club Deportivo de la Dehesa para ver saltar a su hermana. También estaban en el recinto un grupo de compañeras de estudios de doña Elena, que celebraron con gran satisfación el debú de su amiga.

Hace ahora aproximadamente un año que la Infanta Elena comenzó a montar a caballo de forma habitual en el Club de Campo de Madrid bajo la disciplina del jinete Fernando Basail. Doña Elena ha participado en varias pruebas sociales de este club, pero hasta ayer no había tomado parte en ninguna de carácter oficial. En su corta vida hípica, la infanta ha demostrado tener unas excelentes aptitudes para este deporte. La elegancia es su mejor cualidad y su gran afición por los caballos la lleva a tener que aprovechar el poco tiempo libre que la dejan sus clases en Santa María del Mar, para desplazarse hasta el Club de Campo a recibir sus clases. Su figura ya es habitual en los ambientes hípicos en los que se desenvuelve como una deportista más. Todos los jinetes coinciden en afirmar que la infanta, si se lo propone, posee muy buenas cualidades para llegar a convertirse en una excelente amazona.