CC OO no quiere una UGT gubernamental

El que UGT no se convierta, tras la victoria del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), en un sindicato gubernamental es uno de los objetivos propuestos por Marcelino Camacho, secretario general de CC OO, en el informe presentado ayer ante el Consejo Confederal de esta central. En la primera reunión que el órgano máximo entre congresos celebra después de las recientes elecciones generales, Marcelino Camacho subrayó que, aunque el programa del PSOE sea insuficiente para acabar con el paro y la crisis, la mayoría obtenida por los socialistas "es una respuesta favorable hacia el cambio".Marcelino Camacho, que recordó que CC OO había invitado a votar masivamente como respuesta al golpismo, añadió que el país había votado a quien consideraba preparado para realizar la transformación de la sociedad. "La gran mayoría", añadió, "considera que el cambio está ahí. Las esperanzas no pueden verse frustradas y no deben terminar en un nuevo desencanto". No obstante, lamentó que, a causa de la ley D'Hont, otras fuerzas a la izquierda del PSOE hubieran obtenido menor representación parlamentaria.

A pesar de todo, el secretario general de CC OO señaló que "había que forzar al PSOE, no para que se desgaste, sino para que modifique sus planteamientos", y reiteró el ofrecimiento de colaboración de CC OO con todas las fuerzas políticas y sociales para salir de la actual situación de crisis.

Situación mediatizada

En el terreno sindical, el informe de Marcelino Camacho advirtió de la situación en que se encontraba UGT tras la reciente victoria socialista. Para el secretario general de CC OO, se trata de una situación mediatizada, "porque muchos de los miembros de la dirección del sindicato socialista forman parte del grupo parlamentario del PSOE". Esto, según Camacho, introducirá la contradición en el seno de la UGT, "al encontrarse con un programa moderado y limitado. Un objetivo a cumplir es impedir que UGT se transforme en un sindicato gubernamental y que un programa moderado sea un freno para el cambio que ha votado el país".

Volvió a insístir en la tesis de CC OO, potenciación de los comités de empresa -"sin detrimento de que se complementen con las secciones sindicales"-, sobre todo en unos momentos en los que, de acuerdo con sus palabras, hace falta un sindicalismo independiente.

Al referirse a las elecciones sindicales, reiteró la ventaja de CC OO respecto a UGT y subrayó la necesidad de que toda la organización "se volcara" en su realización. En cuanto al supuesto fraude electoral que tanto CC OO como UGT vienen denunciando, Camacho afirmó que "casi un millar de delegados de la central socialista han sido impugnados".