Onaindía cree que sigue siendo válida la 'solución Rosón'

En opinión de Mario Onaindía, secretario general de Euskadiko Ezquerra, la resolución de los problemas de la violencia y la pacificación corresponde en estos momentos al conjunto de las fuerzas democráticas vascas que, en representación de sus electores, están capacitadas para hablar y negociar con el próximo gobierno del PSOE. "Porque ningún grupo político ni nadie", afirma, "y ahora menos que nunca, puede intentar arrogarse la genuina representación de todo el pueblo vasco".

Onaindía, condenado a muerte en el proceso de Burgos, en 1970, y beneficiado por la amnistía de 1977, que hace dos años se sentó con el ministro del Interior, Rosón, para encontrar soluciones prácticas de pacificación, se reafirma ahora en su hipótesis de que "no hay que negociar con las organizaciones militares cuestiones políticas" del tipo de Lemániz o el futuro de Navarra".

Está convencido Onaindía que a estas alturas "ETA ni quiere hacer ninguna revolución ni admitir ningún estatuto de autonomía".

Onaindía piensa que ahora no cabe más que una solución: "Encontrar una salida digna para todas las personas y grupos marginados de la vida civil". La profundización de los contactos entre las fuerzas democráticas y la extensión de soluciones para los presos y exiliados en la vía de pacifiacíon iniciada dentro de una "filosofía de amnistía", condicionada al abandono de las armas, entendida como "un fenómeno individual", con soluciones para cada persona, es, en su opinión, la única salida eficaz para el problema.

En cuanto a la valoración de las negociaciones de su grupo politico y el Ministerio del Interior, y los frutos conseguidos, piensa Onaindía que aunque es un proceso lento ha aportado, aspectos positivos.