Escasa respuesta popular a la campaña de los partidos situados a la izquierda del PCE
A las 18.30 horas del pasado miércoles, el salón de actos de las instalaciones de Gas Madrid estaba dispuesto para recibir a los asistentes a una mesa redonda sobre las elecciones. Los participantes eran representantes de partidos situados a la izquierda del PCE: Partido Socialista de los Trabajadores (PST) y Frente de Izquierda Comunista (coalición en la que participan MC, LCR y SU). El PSOE había declinado la invitación y el PCE, pese a haber aceptado, no asistió. Media hora más tarde, las sillas de la sala solamente estaban ocupadas por los portavoces de PST y MC. "La lluvia, los atascos de tráfico, las horas extraordinarias. Vamos a esperar media hora más", decían. Sesenta minutos después, el acto se suspendía sin que una nueva silla fuera ocupada.
La explicación en la que coinciden los líderes de estos partidos apunta a la atomización de la oferta de la izquierda apellidada radical y al apoyo indirecto o solicitud de voto para el PSOE, tal como han hecho el Movimiento Comunista (MC), la Liga Comunista Revolucionaria (LCR) o el Partido Obrero Socialista Internacionalista (POSI). Salvo el PST, que presenta candidaturas propias en 46 provincias, el resto ha hecho una renuncia de última hora en favor del llamado voto útil para el PSOE. Sus lemas electorales, que conservan la terminología utilizada en el anterior régimen, piden el voto para los socialistas de Felipe González.No quitar votos al PSOE
"Por la victoria obrera. Para echar a los franquistas del Gobierno: voto PSOE, voto obrero y popular", dice el lema de los trostkistas del POSI. Una petición más indirecta de apoyo al PSOE es la que hace la coalición del FIC, "una fuerza revolucionaria al servicio de la unidad y de la lucha popular", que pide el voto para la izquierda en general, petición que varía para los distintos integrantes de la coalición según las diversas comunidades autónomas. Así, el MC, en Euskadi, pide el voto para Herri Batasuna; en Galicia se presentan coaligados con la Lliga y piden el voto para el Frente Popular Gallego; en Canarias apoyan y piden el voto para la Unión del Pueblo Canario, de Sagaseta; en Asturias van con el Bloque de Izquierda Asturiana, y en la Rioja y Extremadura no hacen campaña a favor de ningún partido .
"No podemos apoyar directamente al PSOE ni por lo que ha hecho ni por lo que hará", afirma Manuel Llusiá, candidato del MC, "pero tampoco tenemos interés en quitarles votos. Respetamos las diferentes posturas y, dadas nuestras evidentes y escasas expectativas, pedimos el voto para los partidos o coaliciones más próximos a nuestras ideas". En consecuencia, el despliegue de la campaña del MC (cuya actuación es semejante a la de LCR) tiene una notoriedad mínima en toda España, tanto en lo que se refiere a mítines como a colocación de carteles o distribución de panfletos.
El Partido Comunista de España (marxista-leninista) convoca mítines en aquellos centros, de trabajo en los que cuenta con. algún representante entre el comité de empresa. Han presentado candidaturas en 39 provincias, aunque reconocen que las posibilidades de conseguir un solo escaño son escasas.
El PST es de los pocos que presenta candidaturas propias en casi todas las provincias. José Luis Yuguero, número dos por Madrid, explica que su partido invitó a todos los partidos situados a la izquierda del PCE a suscribir cuatro puntos que todos pudieran defender en las elecciones, de forma que los votos que podrían sumar todos ellos no se pierdan en la abstención o vayan a parar al PSOE o PCE.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.