Vecinos de un barrio de Lugo asfaltan una parte de la calzada romana de la ciudad

Una tercera parte de la calzada romana —algo menos de doscientos metros— de Lugo, uno de los vestigios bimilenarios con que cuenta la ciudad, ha sido asfaltada por los vecinos riel Barrio de San Lázaro a iniciativa propia, argumentando, para adoptar tal decisión, que las solicitudes realizadas al Ayuntamiento para el arreglo de esta importante vía, único acceso directo a la ciudad para el mencionado barrio y que en épocas de lluvia se convierte en un barrizal, no fueron cumplidas.

Los vecinos critican también la inoperancia de Bellas Artes, a quien el Ayuntamiento remitió la solución del problema.

La calzada romana de Lugo formó parte del itinerario Antonino, al ser una derivación de la vía XIX, que enlazaba la ciudad portuguesa de Braga con Astorga y Lugo.

El presidente de la Asociación de Vecinos del Barrio de San Lázaro, propulsora de la iniciativa, aseguró a este periódico que intentarán asfaltar el resto de la vía romana en el caso de que sus peticiones continúen sin ser escuchadas. De igual forma, mostró su extrañeza por las reacciones producidas ante el hecho, asegurando que la calzada romana fue levantada con anterioridad para realizar obras de canalización y que en una ocasión los cantos rodados originales fueron destrozados para hacer hormigón.

Los vecinos, por su parte, pese a reconocer la importancia de la vía romana, precisaron que, "aunque esta corredoira (camino en mal estado) sea la más importante de Galicia, no sirve para nada". La capa asfáltica, de unos cinco centímetros de espesor, fue costeada por el vecindario, que aportó 225.000 pesetas.

Por su parte, el alcalde de la ciudad, José Novo (UCD), declaró a este respecto que "no puede hacer se otra cosa que comprender la razón de los vecinos; porque ni el Ayuntamiento ni Bellas Artes les han dado soluciones.

Es cierto que la calzada romana no se puede tocar pero en el último año Lugo no ha recibido ni un duro para la conservación de monumentos".