El aniversario de la huelga de Gdansk provoca tensión en Polonia

Una atmósfera de efervescencia, que se puso de manifestó en una manifestación masiva registrada el martes en Szczecin en favor de Solidaridad, se detecta en Polonia en vísperas del segundo aniversario de las huelgas en los astilleros Lenin de Gdansk, que coincide con el noveno mes de estado de sitio.El diario del Ejército, ZoInierz Wolnosci, lanzó ayer una seria advertencia y publicó entrevistas con varios coroneles con destino en las regiones polacas más calientes: Gdansk, Varsovia y Silesia, bastión de los mineros y corazón industrial del país.

En una alusión directa a Solidaridad, el diario del Ejército, ataca en su editorial a los "enemigos políticos cuyo nombres son conocidos de todos, y que, en su lucha contra el poder, llaman a la huelga general y ponen en juego toda la experiencia de la resistencia polaca contra la ocupación alemana".

La manifestación de Szczecin, a la que asistieron miles de personas, se formó durante los funerales por el hijo y la nuera del dirigente de Solidaridad Marian Jurczyk, detenido desde el 13 de diciembre de 1981, y que fue autorizado a asistir a los honras fúnebres.

Durante la misa, mientras Jurczyk, escoltado por dos policías, expresaba su dolor en una breve alocución, varios miles de personas que llenaban la iglesia levantaron sus manos haciendo el signo de la victoria y coreando el nombre del dirigente sindical y el de Solidaridad.

La multitud, que no dejó de crecer en el recorrido hacia el cementerio, se enfrentó a los policías que custodiaban a Jurczyk, y éste tuvo que hacer un llamamiento a la calma. Los manifestantes formaron una columna que intentó Regar al centro de la ciudad, pero su paso fue interceptado por un importante despliegue de policía. Varios manifestantes fueron detenidos.

Esta impresionante manifestación ha vuelto a confirmar que la segunda quincena de agosto puede ser crucial para la evolución de la situación polaca.

Desde la clandestinidad, Solidaridad ha hecho un llamamiento a sus afiliados y a la población para que inicien un amplio movimiento de protesta a partir del próximo día 13.

El presidente de Solidaridad, Lech Walesa, actualmente internado en Arlamowo, cerca de la frontera soviética, será transferido entre los próximos días 20 y 25 a otro lugar de detención próximo a Gdansk, según fuentes religiosas polacas. Por otra parte, un cierto número de sindicalistas liberados en julio pasado, han sido internados de nuevo por haber reemprendido actividades "contrarias a la seguridad del Estado".