Orden judicial de embargo de la cabecera de Miario de Valencia'

El Juzgado de Primera Instancia número 7 de Valencia ha dictado orden de embargo preventivo contra la cabecera y diversos bienes propiedad de Valenciana de Noticias, SA (Vanosa), editora de Diario de Valencia. El embargo, que está aún pendiente de las alegaciones de Vanosa, está en función de una demanda ejecutiva presentada por Foco-Berthe, la empresa que imprime el diario. Foco-Berthe intenta con ello asegurarse la cabecera y evitar que, Vanosa imprima el periódico en otros talleres.

La demanda es por impago de letras, por un valor de unos 5.600.000 pesetas. Esta situación obedece en parte a la mala situación económica por la que atraviesa Vanosa, cuya solución depende de una próxima ampliación de capital que está por concretar. En los últimos tiempos ha habido retrasos en la percepción de salarios y los trabajadores llegaron a convocar una huelga, que no celebraron al rec ibir finalmente la paga. El próximo día 8, el comité ha convocado una nueva huelga para todos los días pares del mes si no se abonan los haberes correspondientes al mes pasado que les adeuda la empresa.Fuentes de Vanosa manifestaron ayer a este diario que, aunque no hay nada concretado sobre la salida de la crisis, la impresión es optimista. Al parecer, estaría próximo a crearse un acuerdo entre un grupo de empresarios valencianos y varios accionistas del periódico próximos al PSOE para invertir el dinero necesario, con el fin de que el periódico se mantenga en la calle. Dicho partido está muy interesado en la supervivencia de Diario de Valencia, especialmente ante la proximidad de las elecciones.

En estos momentos Foco-Berthe exige el pago por adelantado de la impresión cada día, mediante talón conformado, y la situación es tensa entre ambas empresas. En función de todo ello, recientemente Vanosa llegó a un acuerdo de principio con la Asociación de la Prensa de Valencia para imprimir el periódico en unos talleres adquiridos hace poco por la corporación profesional, siempre que el diario ofrezca unas garantías suficientes de continuidad. Por otra parte, Diario de Valencia dejaría de salir los lunes.

El embargo, realizado a ins- tancias de Toco-Berthe, tiene un carácter más simbólico que efectivo en cuanto a cubrir la deuda. Esta empresa intenta asegurarse la cabecera y evitar que la publicación contrate los servicios de los talleres de la Asociación de la Prensa, dejan do a deber dinero. Además de la cabecera, se embargan los te letipos, la central telefónica, el télex, el aparato de Dex y las máquinas de escribir, entre otras cosas.

Lo que se da por seguro es que cualquier posible acuerdo sobre la supervivencia de Diario de Valencia pasa por la reducción de la actual plantilla, que es de 92 personas, de las que una treintena pertenece a la redacción. En la última asamblea celebrada por los trabajadores de Vanosa, éstos acordaron no aceptar ninguna reducción del número de trabajadores sin que se haya confeccionado un plan completo de viabilidad del que tenga conocimiento el comité de empresa.

Diario de Valencia fue dirigido en un principio por Juan José Pérez Benlloch, destituido el pasado mes de junio. A su cese se hizo cargo de la dirección Jesús Montesinos, que era subdirector hasta ese momento. La dirección de Montesinos marcó sensibles cambios en el diario, que adoptó una presente conformación gráfica e informativa, de carácter más popular. En cualquier caso, desde su inicio, Diario de Valencia ha pretendido ser una alternativa progresista a la Prensa diaria valenciana que existía con anterioridad a su aparición. Los otros dos diarios de la capital son el conservador Las Provincias, perteneciente a una empresa privada, y el también conservador Levante, de la cadena Medios de Comunicación Social del Estado.