La liberalizacion del sistema económico, solución a la crisis
Para remontar la crisis económica es la hay que sustituir el modelo de economía intervencionista y liberalizar el sistema económico. Esta es la tesis contenida en un informe del Centro de Estudios y Comunicación Económica presentado hoy.
El estudio, titulado La política económica del Gobierno de la señora Thatcher, completa las otras dos alternativas económicas para la salida de la crisis analizadas anteriormente por el centro: la francesa y la norteamericana.El profesor Villaverde Castro, de la Universidad de Valladolid, señala en la introducción, y también lo manifestó en la presentación, que es erróneo e interesado asociar el monetarismo con posiciones políticas conservadoras, porque cualquier teoría económica no es, en principio, ni de derechas ni de izquierdas, como se demuestra en el caso del monetarismo en la práctica de las políticas internacionales.
Respecto a la política económica británica, Arthur Seldon, del Instituto de Asuntos Económicos de aquel país, manifestó que su principal objetivo era y sigue siendo el de liberalizar la economía, la sociedad y la política británicas; apartarse del poder del Estado y de la burocracia y avanzar hacia la emancipación del ciudadano y de la soberanía del consumidor, mediante la restauración de una economía competitiva, para alcanzar el crecimiento económico.
Juan José Toribio, presidente del Instituto Español de Analistas de Inversiones, estableció las posibilidades de aplicar en España la política económica de Thatcher.
Coincidió con Seldon en que la crisis actual ha sido originada por el modelo de economía intervencionista de las últimas décadas, y propuso, para remontarla, una sustitución progresiva y acelerada de aquel modelo por una liberalización del sistema económico español.
Afirmó el carácter estructural de la crisis y la necesidad de proceder a reformas también estructurales, en la línea de las iniciadas por el programa de Margaret Thatcher, adaptándolas a las circunstancias de nuestro país.
A juicio de Juan José Toribio, esta reforma debe pasar por la reestructuración del sector publico, que favorezca el ahorro privado e incremente el ahorro público, y continuar la reforma del sistema financiero, que incida favorablemente en una asignación más eficaz de los recursos.
Asimismo, estima necesario adecuar a un ritmo más idóneo las estructuras empresariales a través de los procesos de reestructuración industrial, acentuar la reducción del intervencionismo en los mercados de productos y recursos productivos, propiciando mayores liberalizaciones en el control de precios, en el control de cambios y en el mercado de trabajo, y, por último, continuar la reducción de la dependencia energética del exterior.
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