La atención de los bolsistas, en Andalucía

La semana bursátil ha terminado prácticamente como empezó, esto es, con los ojos y la atención de los bolsistas volcados en los resultados de las elecciones andaluzas. No obstante la sabiduría, que algunos denominan cazurra de los responsables de algunas sociedades de inversión, decidió que había llegado el momento de tomar posiciones, esto es, comprar algunas partidas de pequeña significación en valores concretos, por si acaso no es tan fiero el león como le pintan, y a la postre, la próxima semana inicia el mercado de valores una trayectoria positiva, al amparo de las múltiples convocatorias a las juntas de acciones bancarias, que normalmente suelen contar con un respaldo incondicional de las propias entidades.Así, el papel en el grupo bancario había descendido prácticamente a la mitad de lo que resultaba en la reunión del jueves. Las órdenes de venta seguían constituyéndose en amplia mayoría frente a los escarceos compradores, pero por ejemplo el Bilbao mejoraba 2 puntos en la Bolsa madrileña y su saldo vendedor se limitaba a 302 solitarios títulos.

El resto de sus compañeros se aplicaron con énfasis a generar las repeticiones cotidianas, olvidando un día más, las posiciones del propio mercado. La enseñanza que ha facilitado las cuatro sesiones que compusieron esta tanda semanal, ha sido clara: los bancos por el momento no tienen ninguna intención de perder el 300% domo precios de referencia. Incluso el puro Popular ha realizado algunas operaciones de las que no tiene excesivamente acostumbrados a los habituales asistentes a las reuniones bursátiles, que tenían como claro objetivo el mantenimiento del precio de sus acciones por encima de la citada cota del 300%. Concretamente este valor tenía un saldo vendedor ayer de 30.517 acciones, y el cambio que le proponía la caja, en la Bolsa de Madrid era 294%. Frente a ello se mantuvo en el 303%.

Las eléctricas consiguieron recuperar algo de su perdido pulso especialmente gracias a la labor de Hidrola, que ayer se comentaba que repartirá un dividendo de 12,50 pesetas en el próximo mes de junio, lo que le ha servido para quebrar su racha negativa, y mejorar al cierre 75 centésimas. Junto a ella se dieron algunas pequeñas mejoras en Viesgo y Unión. Sevillana repetía a trancas y barrancas y Fecsa aceptaba el recorte de un cuartillo en su precio.

No obstante, volvieron a ser los valores del sector de inversión los que centraron el mayor número de órdenes de compra. La mejora de 2,54 puntos en su índice particular refleja el incremento de las órdenes de venta que hacia algunas de estas sociedades se canaliza a diario, y cuyos ordenantes apuestan al parecer por la ya comentada posibilidad de que se proceda a la disolución de algunas de estas compañías, y que el precio liquidativo resultante sea superior al valor de sus acciones en la Bolsa. Si esto es una pura especulación, o si realmente se producirá, es algo que aún está por determinar, pero lo cierto es que al parecer, en las apuestas de los inversores cuenta con un buen número de posibilidades el que las operaciones de liquidación se generalicen en el sector de las sociedades de inversión. Para la próxima semana se espera un cambio en la orientación genérica del mercado, tan pronto como se asimilen los resultados de las elecciones andaluzas.