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Malestar en San Sebastián por el traspaso de Alonso

La noticia del traspaso del jugador Alonso al Barcelona ha sido muy mal recibida por la afición donostiarra. Al socio le fastidia que un hombre como Alonso abandone su equipo, pero le indigna que su directiva le tome el pelo, aunque sea en nombre del bien del club No en vano, la junta directiva de la Real Sociedad ha dicho que el centrocampista internacional es un hombre fundamental, pero no imprescindible, en el intento de soslayar el compromiso adquirido recientemente ante los socios, por el que se obligaba a no traspasar ningún jugador "considerado imprescindible". ¡Qué grandes somos!, un internacional con puesto fijo en el Mundial no es para nosotros imprescindible, comentan los aficionados con ironía y amargura.La operación de traspaso, por otra parte, es algo prácticamente hecho. El Barcelona desembolsa ochenta millones, setenta para la Real y diez para el jugador en concepto de porcentaje por la operación. Alonso fichará probablemente por tres temporadas con diez millones al año. El contrato será firmado tras el partido final de la Recopa, que debe jugar el Barcelona el próximo día 12. Miguel Angel Alonso, de todas formas, ya ha manifestado que aprenderá catalán, en unas declaraciones en las que pide comprensión a la afición por aprovechar esta oportunidad.

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La directiva de la Real Sociedad hace hincapié en que el centrocampista internacional tiene un buen sustituto en Larrañaga, un hombre que ha sido titular de la mitad de los partidos de esta Liga, con un gran resultado. Para muchos aficionados, sin embargo, el problema reside, quizá, en saber quién va a ser ahora el sustituto de Larrañaga, Zamora o Diego, ese complemento imprescindible para ganar en un torneo como la Liga, en donde los suplentes también deciden.

De fondo de la polémica, está el problema del déficit que la Real acumula invariablemente temporada tras temporada y que asciende a casi ochenta millones, sumando los veinticinco o veintiocho que corresponderán al actual ejercicio. Paradógicamente, la Real aumenta sus pérdidas a medida que el equipo ocupa mejores puestos en el campeonato, debido de un lado, a lo limitado del aforo de Atocha y de otro, al desembolso a los jugadores de las primas por partidos ganados y por los ascensos en la clasificación de los campeonatos. Algunos informes indican que la Real Sociedad debería ocupar puestos inferiores al quinto lugar en el campeonato de Liga como única forma de compensar su presupuesto.

La solución a los males económicos del club pasa por un nuevo campo con más aforo, tal como se ha repetido hasta la saciedad. La decisión de traspasar a Alonso en estos momentos, se ha interpretado también como una forma de poner entre la espada y la pared a las autoridades municipales, que se oponen al campo de Zubieta, alegando motivaciones urbanísticas. Según esta versión el traspaso de Alonso sería algo así como un artefacto de efecto retardado, que, al final, obligaría a levantar muchos de los impedimentos con que tropiezan los planes del club. Sea como fuere, si hoy los aficionados critican a su directiva, pasado mañana esas misrnas críticas pueden volverse abiertamente contra representantes municipales. El PNV estudia un proyecto para la ampliación de Atocha, que apoya Herri Batasuna.

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