La Federación Internacional excluye a Piquet y Rosherg
La Federación Internacional decidió ayer, en su reunión de París, sancionar a las escuderías Brabham y Williams, por no cumplir la reglamentación respecto al peso. De esta forma, la decisión irrevocable de la FISA da la razón a la escudería Ferrari en su protesta contra los equipos británicos. Al excluir a Piquet y a Rosherg, el ganador del Gran Premio de Brasil es, ahora, el francés Alain Prost, con lo que el piloto de Renault se destaca en la clasificación del Mundial.
Pese a que aún está pendiente la resolución sobre la reclamación puesta contra Ferrari por Tyrrell, la FISA parece ponerse ahora de parte de los grandes constructores, enfrentados con los pequeños por la arbitraria utilización de los reglamentos por parte de éstos. La amenaza de retirada de Ferrari parece haber surtido el efecto deseado por el mítico commendatore italiano.Ante la próxima reunión de la Federación Internacional, en la que los grandes fabricantes -no sólo los involucrados en la Fórmula 1, sino también los restantes- quieren derribar al presidente de la FISA, el francés Balestre, parece haber modificado su posición de apoyo incondicional a Ecclestone y las escuderías que el británico protege. De esta forma, Balestre podría intentar no ser cuestionado por los grandes fabricantes de automóviles, sabedor de que, sin su apoyo, no duraría mucho en el puesto.
Al dar la razón a Ferrari, de paso, el francés Balestre concede el primer puesto con amplio mar gen de puntos a Renault, el gran beneficiado de la operación.
Rigurosos controles en San Marino
De cara al Gran Premio de San Marino, que se disputa este domingo en el circuito italiano de Imola, la Federacion Internacional ha dicho que los comisarios harán controles rigurosos sobre el peso y no consentirán a las escuderías británicas correr por debajo del límite reglamentario.Brabham, Williams, McLaren y algunos otros equipos habían utilizado el reglamento de forma muy particular. En dicho reglamento, se especifica que el peso mínimo de un monoplaza de Fórmula 1 debe ser de 580 kilogramos. Pero este peso debe darlo con los depósitos de líquidos de agua, aceite y frenos completos. Por ello, la reglamentación internacional permitía el rellenado de estos depósitos después de cada carrera y antes de ser pesados, por considerar que parte de esos líquidos podrían haber mermado con la utilización del coche en la competición.
Estas escuderías utilizarán entonces unos depósitos de agua, teóricamente destinados a refrigar los frenos, con una capacidad para unos treinta litros. Antes de la carrera, en la verificación, el coche pesaba, con ese depósito lleno, por encima del peso mínimo. Pero una vez pasada la verificacion, el deposito era vaciado, con lo que el coche ganaba de treinta a cuarenta kilogramos de peso y una ventaja tan clara como irregular. Terminada la prueba, para pasar la verificación, el coche era nuevamente recargado, tal como autoriza la reglamentación vigente al considerar que el líquido de refrigeracion de los frenos podría haber sufrido una merma con el USP normal en la carrera.
Con la nueva aclaración por parte de la FISA, las escuderías británicas perderán parte de la irregular eficacia conseguida en las primeras pruebas de esta temporada, lo que permitirá, al menos en teoría, un reforzamiento del dominio de los motores turboalimentados. La nueva clasificación del Mundial, antes de la carrera del domingo, está ahora encabezada por el francés Alain Prost, de Renault, con dieciocho puntos, seguido por el austríaco Niki Lauda, de McLaren, con doce, y el finlandés Keke Rosberg, de Williams, y el británico John Watson, de McLaren, ambos con ocho.
