Calvo Sotelo y los dirigentes griegos tratarán de la entrada de España en el Mercado Común y en la OTAN
El presidente del Gobierno español, Leopoldo Calvo Sotelo, llega mañana, lunes, a la capital griega, Atenas, para una visita oficial de menos de dos días de duración, en la que discutirá con altos funcionarios del Estado y del Gobierno helenos la incorporación de España al Mercado Común y a la Alianza Atlántica (OTAN). Desvanecidas las anteriores suspicacias griegas en torno a la entrada de España en ambos organismos, fuentes diplomáticas de ambos países aseguran que el presidente español Leopoldo Calvo Sotelo no tendrá mayores dificultades en conseguir esos objetivos.
La subida al poder, en octubre del pasado año, del partido socialita heleno PASOK, dirigido por el actual primer ministro, Andreas Papandreu, había sido vista con recelo tanto en Madrid como en las capitales de la Europa comunitaria, ante la vigorosa campaña electoral de Papandreu sobre una eventual retirada de Grecia de las comunidades europea y atlántica si accedía al poder. Como es habitual en todos los países, la política del PASOK, una vez instalado en el poder, cambió de tono. Papandreu ha abandonado la idea de convocar un referéndum sobre la retirada de Grecia de la CEE, limitándose a presentar "un memorándum de agravios" al Mercado Común, que será discutido por la Comisión Europea a Finales de este mes en Bruselas. En cuanto a la organización atlántica, Papandreu se ha limitado a exigir más garantías de los países de la OTAN en relación con el contencioso heleno-turco sobre el espacio aéreo y marítimo del Egeo.La oposición griega a la entrada de España en el Mercado Común estaba basada en lo que Atenas consideraba una globalización de la entrada en la Comunidad de Grecia, Portugal y España, lo que supondría, en opinión griega, una reducción de la ayuda regional comunitaria. Esta oposición cesó automáticamente al adelantarse el ingreso heleno en el Mercado Común el 1 de enero de 1981.
En cuanto a la adhesión de España a la comunidad atlántica, Papandreu expresó sus dudas en cuanto a su conveniencia, ya que consideraba que nuestro ingreso desequilibraría la compensación de fuerzas entre los dos bloques. Incluso se llegó a hablar de un posíble veto griego coil el fin de conseguir la ayuda de la OTAN en su contencioso con Turquía. El Gobierno de Atenas, ante la presión comunitaria, manifestó que no intentaría hacer ningún chantaje a la Alianza con la entrada de España, y anunció que, aunque esa entrada no le gustaba, la apoyaría sin reservas.
Amplio espectro de temas
Esta posición griega fue puesta de relieve por el ministro heleno de Asuntos Exteriores, Iannis Jaralampulos, durante la firma del protocolo de adhesión de España en Bruselas y reiterada en Madrid durante las conversaciones que mantuvo con su colega español, José Pedro Pérez-Llorca, duante la reanudación de las sesiones de la Conferencia para la Seguridad y Cooperación en Europa.
Aparte de los temas comunitario y atlántico, Calvo Sotelo, que viajará acompiañado de Pérez Llorca, discutirá con el presidente Karamanlis y con su colega, el primer ministro Papandreu, un amplio espectro de temas internacionales, entre los que cabe destacar la actual crisis de las Malvinas y su repercusión en el problema de Gibraltar, la situación en los Balcanes y la propuesta de desnuclearización de la península balcánica -no hay que olvidar que PérezLlorca visita recientemente Bulgaria-, así como la explosiva situación en el Próximo y Medio Oriente, situación seguida muy de cerca por ambos países, que mantienen una actitud de apoyo activo a la causa árabe. En estos temas desempeñará un importante papel el actual embajador de España en Atenas, Pedro López Aguirrebengoa, uno de los mejores expertos en asuntos árabes del Ministerio de Asuntos Exteriores español y que hasta hace poco ocupaba la Dirección General de Africa Oriente Medio.
Uno de los temas, quizá el único, de desacuerdo entre los dos países lo constituirá, sin duda, la cuestión de la cooperación política europea dentro de la Comunidad. Grecia ha adoptado un papel diametralmente opuesto al del resto de las capitales comunitarias en temas tan fundamentales como el de la condena a Polonia tras la instauración en aquel país de la díctadura militar. Atenas se negó a suscribir esa condena y no secundó la adopción de sanciones económicas contra el régimen de Varsovia. Igualmente, en su intervención en la Conferencia de Madrid, se negó a unirse a los países occidentales y neutrales en sus ataques a la Unión Soviética por su participación indirecta en los sucesos polacos.
Larga reunión
El presidente Calvo Sotelo tiene prevista una larga reunión, seguida de un almuerzo de trabajo, el lunes por la mañana con Papandreu, y el martes 13 será recibido en audiencia por el presidente de la República y, restaurador de la democracia en Grecia tras el golpe de los coroneles, Constantino Karamanlis. La delegación español regresará a Madrid en un Mystère de la Subsecretaría de Aviación Civil el martes por la tarde.
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