Dos personas, muertas al derrapar un autobús escolar en Pozuelo del Rey

El conductor de un autobús escolar, Pedro Navarro, de 34 años, y la niña María Blanca Martínez González, de trece, resultaron muertos en un accidente de tráfico ocurrido a primera hora de la mañana de ayer en la carretera de Torres de la Alameda a Pozuelo del Rey, al derrapar un autobús escolar en el que quince niños se dirigían al colegio internacional Eurovillas de Nuevo Baztán. Con estas dos nuevas víctimas, son ya más de cien las producidas en accidentes de este tipo desde 1977.

Las causas del siniestro se desconocen hasta el momento, según informó la Guardia Civil de Tráfico. Este contínuo desconocimiento de las causas de accidente pasará a la historia en próximo año, ya que entonces entrará. en vigor el decreto ley de octubre. del pasado año, según el cual este medio de transporte estará obligado a llevar un Tacógrafo, de características similares a la llamada comúnmente caja negra de los aviones, en la que se recoge el estado e incidencias de los aparatos de mando de los aviones, con cada una de las incidencias de vuelo. Lo que permitiría conocer en cada momento las causas que motivan los accidentes.El vehículo se salió de la calzada, según parece, y cayó por un terraplén de tres metros de desnivel. El autobús pertenece a la empresa Medieta, de Carripo Real, y su matrícula es M-822.175. La antigüedad de la placa hace pensar en la posibilidad de que el suceso pudiera ser consecuencia de un fallo técnico.

En el momento del accidente viajaban en el autocar un total de quince niños. Una de las niñas, Esther García, sufrió fractura de una pierna y fue atendida en la Residencia Sanitaria La Paz. Otro de los niños, David Santos, sufrió heridas de importancia y fue atendido en el ambulatorio de Alcalá de Henares. Los restantes escolares resultaron ilesos. Entre estos últimos se encontraba un hermano de María Blanca Martínez González. Tras ser reconocidos en el servicio médico existente en la localidad de Torres de la Alameda, los niños volvieron a sus domicilios distribuidos entre los pueblos de Campo del Real, Torres de la Alameda y Pozuelo del Rey.

El conductor fallecido era Pedro Navarro Navarro, de 34 años de edad, soltero, nacido en la localidad madrileña de Valdaracete, quien trabajaba contratado por el mismo colegio al, que se dirigía y que no pertenecía a la Federación Nacional de Transporte Escolar, a la que están afiliados la mayoría de los trabajadores del sector, según manifestó a Radio Nacional su presidente, señor Pertierra.

Funcionarios municipales de Campo del Real (localidad en la que viven la mayor parte de los niños que viajaban en el vehículo siniestrado) expresaron la preocupación del Ayuntamiento por el suceso, para añadir que "la carretera no es excesivamente estrecha ni hay causas especiales aparentes. El conductor estaba considerado como un hombre de experiencia y todo parece apuntar a una avería del vehículo".

Más de cien niños muertos en cinco años

Desde el 19 de abril de 1977 el número de niños muertos en accidentes de autobuses dedicados al transporte escolar se eleva a más de cien. En la mayoría de los casos los vehículos se salieron de la carretera por causas no identificadas en las investigaciones periciales, lo que revelaría en principio que los correspondientes accidentes tendrían como causas fundamentales un fallo humano o técnico.

El 16 de febrero del año pasado se publicó en el Boletín Oficial del Estado un real decreto por el que se procedía a la reorganización de la inspección técnica de vehículos. Según este decreto, los autobuses escolares están obligados a pasar dos inspecciones anuales, pero si el coche tuviese más de diez años habrá de someterse a tres revisiones, una cada cuatro meses. En total hay en España más de veinte mil autocares en estas condiciones. Pero las cifras de vehículos revisados queda muy por debajo, a pesar de que tal operación no supera las 2.000 pesetas.

En el pasado mes de febrero tendría que haberse procedido en el Ministerio de Transportes y Coel Ministerio de Transportes y Comunicaciones a una versión definitiva del Libro Blanco del Transporte Escolar, publicado en noviembre del año pasado.

Según datos del Ministerio de Educación y Ciencia facilitados en noviembre de 1981, entre 1971 y 1972 el transporte afectaba a 124.000 alumnos de centros públicos, cifra que se elevaba ya a 400.000 en el curso 80-81.