El Consejo de Administración de RTVE Española aplaza la aprobación del plan de actividades del Ente Público

El Consejo de Administración de RTVE decidió aplazar la aprobación del primer plan de actividades del Ente Público para 1982, al término de una larga sesión que se prolongó hasta la madrugada de ayer. El Consejo decidió, de acuerdo con el director general, Carlos Robles Piquer, que era necesario esperar a que éste introdujese sus propias modificaciones y otras sugerencias de los consejeros.El plan del Ente Público para este año -cuyo presupuesto se aproxima a los 35.000 millones de pesetas- sobre el que Robles Piquer había aportado una copiosa documentación el pasado mes de diciembre, se refiere a las actividades que piensa desarrollar RTVE.

Los vocales socialistas y el comunista plantearon una severa crítica a algunos extremos del plan. El Ente Público, según estos consejeros, tiende a convertírse en una estructura mastodóntica en detrimento de las competencias que deberían tener cada una de las tres sociedades anónimas: Televisión Española (TVE), Radio Nacional de España (RNE) y Radio Cadena Española (RCE).

El documento elaborado por el director económico-financiero, Gonzalo Ferre, fue calificado por los socialistas como "críptico, atemporal, insuficiente, conservador y con escasa perspectiva de futuro". Las tres sociedades resultarían meros apéndices de RTVE. El plan de aquella dirección tiende a aplazar sine die, según los socialistas, el proceso de transición hacia una organización empresarial, moderna y funcional de la radiotelevisión, tal como dispone el Estatuto.

El afán centralizador del aparato burocrático del Ente es evidente, también, en el proyecto de la dirección de relaciones internacionales, cuyo titular es Luis Ezcurra. A esta dirección corresponderían todas las relaciones con organismos internacioales de telecomunicación y radiodifusión; las relaciones de RTVE y de sus tres sociedades con las embajadas acreditadas en España y "de acuerdo con el Ministerio de Asuntos Exteriores, las del Estado en el exterior"; la participación en festivales, certámenes y congresos; las coproducciones con otros países; las futuras tecnologías, como la televisión por satélite; e incluso la emisora de Radio Exterior de España -de RNE-, la coordinación de delegados y corresponsales de las tres sociedades, así como "la supervisión y control de las salidas al extranjero del personal de RTVE". El propio Robles Piquer aludió, en algún momento, al carácter "pomposo" de algunos pasajes de la redacción de este documento, que parece proponer la construcción de una RTVE paralela.

Todos los consejeros elogiaron el esfuerzo que suponía la elaboracion del plan, que los centristas estaban dispuestos a aprobar porque prevalecían, a su juicio, los aspectos positivos. Los socialistas entienden que la actitud de Robles Piquer "hacia una solución de compromiso ha sido más favorable que la mantenida por algunos consejeros del grupo centrista". Robles Piquer, que insistió en la perfectibilidad del plan, se comprometió a presentar un nuevo texto antes de finales de marzo.