Asegurada la continuidad de Hytasa por voluntad del Gobierno
"La continuidad de Hytasa está totalmente asegurada, porque el Gobierno así lo quiere, y se demostrará que es viable si se toman las medidas incluidas en el plan de reconversión del sector textil", ha declarado el gerente de esta empresa, José Fernández Zamorano. En su opinión, Hytasa -incautada por decreto en febrero de 1980- tendrá beneficios a partir de 1984.
El último Consejo de Ministros de 1981 acordó prorrogar hasta el 31 de marzo próximo los acuerdos que dieron origen a la incautación de la factoría, cuya vigencia expiraba legalmente el 31 de diciembre. Durante estos tres meses la Administración central examinará el plan de viabilidad elaborado por la gerencia, acomodándolo a las previsiones del plan general de reconversión del sector, aprobado en agosto pasado. Precisamente durante los días 4 y 5 de enero permaneció en Sevilla un equipo de técnicos de la Administración que analizó el funcionamiento de la fábrica.Hilaturas y Tejidos Andaluces, SA (Hytasa), la empresa más importante del textil sevillano, llegó a estar al borde de la desaparición a causa de la recesión del mercado y una deficiente gestión empresarial. Dada la problemática social de la región andaluza y la importancia de la factoría para la economía algodonera de esta zona, el Gobierno decretó su incautación, tras una serie de largas y complejas negociaciones con obreros, accionistas y acreedores, que dirigió el entonces vicepresidente del Gobierno, Fernando Abril Martorell. Su plantilla actual es de 1.680 trabajadores.
La incautación de Hytasa, que contó desde el principio con la oposición rotunda de la patronal textil catalana, ha perseguido tres objetivos fundamentales, según Fernández Zamorano: la continuidad del trabajo, la reorganización de la empresa y la elaboración del plan de viabilidad. Con respecto a este último aspecto, la necesidad de adaptar un plan inicial a la reconversión del sector textil supuso la pérdida de algunos meses en la actividad reestructuradora, con la consiguiente alarma en medios económicos y sociales sevillanos, puesto que llegó a hablarse de abandono por parte del Gobierno y a pronosticarse un cierre inmediato de la fábrica.
Para el gerente, el plan será aprobado, previo acuerdo entre las partes implicadas.
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