A los seis meses de Mitterrand alegría en la Bolsa de París
La Bolsa de París despidió el año con serpentinas y confetis, siguiendo una vieja tradición que ni la victoria electoral de los socialistas en el mes de junio pasado ha sido capaz de hacer olvidar. Quizá sea porque el mercado de valores parisiense ha hecho quedar mal a los pronosticadores del desastre, que anunciaron las plagas bíblicas para la Bolsa tras la pérdida de las elecciones por las formaciones conservadoras. El mercado de París, tras unas primeras semanas de nerviosismo, recuperó su actividad normal, y los cambios se encontraban a finales del verano en unos niveles similares a los que estaban en las jornadas preelectorales.
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