Fuertes lluvias, vientos huracanados y cortes del fluido eléctrico en media España

Un corte general del fluido eléctrico afectó ayer a la zona centro y a gran parte del sur de España, Levante y Cataluña y cortes intermitentes se produjeron en puntos de Galicia y Castilla. Como ya ocurriera en 1977, la avería de la estación vallisoletana de La Mudarra provocó la reacción en cadena que dejó sin servicio a más de la mitad del país, mientras las autoridades se veían obligadas a desmentir los rumores sobre la proximidad de un ciclón. Un pescador en Huelva, un estudiante en Burgos y un ingeniero en Madrid resultaron muertos por la violencia del temporal, el último de ellos al derrumbarse una grúa sobre el coche en que circulaba por la calle del Príncipe de Vergara. El número de heridos se aproxima al medio centenar.

Las fuertes lluvias, los vientos huracanados y las inundaciones en numerosas localidades fueron la tónica general de la noche del martes al miércoles y la mayo parte del día de ayer. Averías te lefónicas, Corte de carreteras y vías férreas, y voladura de techumbres provocaron situaciones difíciles para muchos españoles en esta jornada previa a la Nochevieja. Las desgracias personales, aunque importantes -tres muertos y medio centenar de heridos- no fueron sin embargo, tan graves como se temió.El pronóstico meteorológico indica que disminuirá la intensidad de los vientos. El servicio eléctrico quedó anoche restablecido en todo el territorio nacional, excepto en lugares donde no se pudo levantar los postes de conducción derriba dos por el viento. Subsisten pro blemas importantes respecto a personas que han perdido sus ca sas, o éstas han sufrido grave desperfectos, en Castilla-León y Extremadura.

El apagón de luz se repitió en e caso de Madrid por tres veces consecutivas a lo largo de las primeras horas de la tarde de ayer. Las inundaciones que desde principio de semana se produjeron en la capital de España y el fuerte temporal que asoló Madrid se vieron agravados por el apagón de ayer. A lo largo de todo el día, el servicio de bomberos realizó alrededor de 1.500 salidas, entre las que hay que destacar una, que sirvió para rescatar el cadáver de un hombre que resultó muerto al caer sobre el automóvil que conducía una grúa de una obra de la calle del Príncipe de Vergara.

La tormenta sobre Madrid comenzó a última hora de la noche del martes y se prolongó hasta avanzada la mañana de ayer. Durante ese tiempo llegaron a registrarse los 32 litros de agua por metro cuadrado en el aeropuerto de Barajas, así como un viento huracanado que alcanzó los 75 kilómetros por hora.

El colapso circulatorio fue total durante varias horas en el centro madrileño, como consecuencia de que los semáforos dejaron de funcionar, al menos, en tres ocasiones. En los grandes almacenes de la ciudad y centros sanitarios no se dieron situaciones de peligro, habida cuenta de que todos están dotados de grupos electrógenos.

A última hora de la noche de ayer quedaban aún varios núcleos de población sin fluido eléctrico.

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