Derrotadas las propuestas de la corriente de izquierda en el congreso del PSOE de Madrid
El tercer congreso regional del PSOE madrileño finalizará hoy con la elección de una ejecutiva continuista respecto de la anterior, en la que Joaquín Leguina conservará la secretaría general y José Acosta será el candidato a presidente. Las propuestas de la corriente de izquierda en favor de la representación proporcional fueron derrotadas en comisión, así como los intentos de poner obstáculos a las alianzas o integraciones de sectores situados a su derecha, expresión que aludía, al parecer, a Fernández Ordóñez y su entorno.A juicio de izquierda socialista, carece de sentido diluir el mensaje y la ideología del PSOE para conseguir el respaldo de un enorme abanico electoral, que vaya desde las clases medias hasta los jornaleros agrícolas y los movimientos radicales, puesto que difícilmente se va a conseguir todo ese respaldo y, en cambio, el partido corre peligro de «desnaturalizarse». La propuesta se materializó en el sentido de incluir, en la resolución política, la mención expresa de que el PSOE trabaja para construir un «bloque anticapitalista». Fue derrotada en comisión, aunque todavía puede ser discutida en pleno.
El congreso debatió las ponencias a lo largo de la jornada de ayer. Las noticias obtenidas respecto a la marcha de los debates muestran que los dos sectores enfrentados no han avanzado mucho: mientras el de Leguina conserva su preponderancia, pero sin conseguir un dominio suficientemente claro como para garantizar la estabilidad por largo tiempo, la corriente de izquierda mantiene una tenaz resistencia, pero parece incapaz de dar un vuelco a favor de sus posiciones.
Leguina declaró a este periódico que piensa ofrecer un compromiso a la minoría. Las bases del mismo serían las siguientes: la ejecutiva electa se mantendrá durante tres años y no caerá necesariamente por el hecho de perder una votación en el comité regional (máximo órgano entre congresos); a cambio de garantizar su estabilidad, se compromete a elaborar las listas electorales. según criterios objetivos, así como a ofrecer facilidades para participar en el debate.
Esto último se refiere a tomar parte en la conferencia federal sobre organización del partido socialista, acordada por el 29º Congreso Federal -tras el famoso 99,6% de apoyo a la ejecutiva saliente-, que podría convocarse en un plazo de dos meses. El compromiso sugerido por Leguina excluye el reconocimiento del funciohamiento del partido en corrientes, por lo que parece dudoso que izquierda socialista pueda asumirlo.
Por su parte, los miembros más cualificados de la corriente de izquierddinantuvieron ayer el debate, tanto político como organizativo, en las correspondientes comisíones del congreso. Su intento se relaciona con dos operaciones distintas, aunque complementarias: por una parte, demostrar el falseamiento de los resultados del 29 Congreso federal, dejando claro que el 99,6% de los votos concedidos a la ejecutiva por la Federación Madrileña no responden a la realidad por otra, avanzar en la complicada operación de reorganizar la corriente de izquierda.
Joaquín Leguina negociaba ayer la ejecutiva regional con las agrupaciones favorables a la mayoría, y con las que, sin serlo, tampoco están alineadas con la corriente de izquierda. El núcleo de la misma no va a experimentar cambio alguno, pero aproximadamente el 25 % de los puestos podrían dar entrada a personas distintas, si fructifican las negociaciones con las agrupaciones no situadas en uno de los dos sectores principales.
A su vez, la corriente de izquierda mantenía su intención de presentar una candidatura con Luis Gómez Llorente, Manuel de la Rocha y Luis Rufilanchas en los primeros puestos. Algunas personas de este sector no renunciaban a la idea de conseguir más amplios apoyos, con intención de recomponer esa corriente en torno a los sectores del PSOE que no proceden de las operaciones de integración. El enfrentamiento existente entre las personas procedentes de la antigua Convergencia Socialista y de otros veteranos en el partido subyace en ese planteamiento.
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