Tres aviones venezolanos y uno libio, secuestrados ayer
Tres aviones comerciales de las líneas aéreas venezolanas y un aparato libio fueron secuestrados ayer. Dos de los tres primeros, con más de doscientas personas retenidas como rehenes, aterrizaron, tras haber permanecido diez horas en Colombia y liberar a 54 pasajeros a cambio de combustible, en Tegucigalpa, mientras el tercero tomó tierra en el aeropuerto de la capital de Guatemala.Los secuestradores, cuya identidad política no está todavía aclarada, solicitan la liberación de un grupo de «presos políticos» y la entrega de diez millones de dólares (casi mil millones de pesetas), a cambio de la puesta en libertad de los rehenes.
El avión libio, con 44 personas a bordo, fue tomado por tres jóvenes chiitas libaneses pertenecientes al movimiento político-militar Amal, cuando se dirigía desde Zurich a Trípoli, obligando al piloto a tomar tierra en Beirut.
Tras liberar a una mujer embarazada y dos niños, los secuestradores libaneses solicitaron que se reabasteciese de combustible al aparato para despegar del aeropuerto, y señalaron a las autoridades libanesas que previniesen al coronel libio Muamar el Gadafi de que no habría «liberación de pasajeros antes de que sea liberado el imán Musa Sadra», jefe de la comunidad chiita que desapareció hace dos años y está, según los secuestradores, retenido contra su voluntad en Trípoli.
Página 3
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.