Socialistas y comunistas se harán cargo de todas las delegaciones en el Ayuntamiento de Valencia

El alcalde de Valencia, Ricard Pérez, del PSOE, repartió ayer, mediante una resolución de la alcaldía, las delegaciones de servicios que ostentaban los concejales de UCD entre socialistas y comunistas. La titularidad de las delegaciones municipales que estaban en manos de concejales centristas quedaron vacantes después de que el alcalde destituyera a dos de ellos y el resto renunciase en solidaridad con los cesantes.

La crisis municipal de Valencia, resuelta con la redistribución de delegaciones efectuada ayer, se inició con unas declaraciones de Pérez Casado para anunciar que iba a suspender las delegaciones a los concejales de UCD.

Posteriormente, la ejecutiva del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE) estimó precipitada esta medida, y se suspendió provisionalmente hasta que, a principios de este mes, el alcalde destituyó únicamente a José Luis Manglano, presidente provincial de UCD, y Francisco Orellano, miembros del Grup d'Acció Valencianista, movimiento radicalmente anticatalanista.

La ejecutiva provincial de UCD acordó que el resto de los trece concejales de UCD que hay en el Ayuntamiento abandonase voluntariamente sus delegaciones, pero siete de ellos eran contrarios a hacerlo y solicitaron exponer su postura ante el consejo político provincial. La ejecutiva, sin embargo, les envió una carta dándoles un plazo para renunciar, y todos cumplieron este mandato.

Las delegaciones con que contaban los concejales centristas, han sido distribuidas entre los seis concejales comunistas y los doce socialistas.