Los receptores de quinielas apoyan la implantación de la apuesta nacional del hipódromo

Los receptores de quinielas se muestran muy interesados en la implantación de la apuesta nacional en las carreras de caballos, ya que el nuevo juego podría contribuir a aumentar sus ingresos, una vez que el Patronato de Apuestas Mutuas no cree oportuno elevar la comisión que reciben. La apuesta nacional que en estos momentos más gusta es la propuesta por Luis Rozalén, propietario de una cuadra de caballos, y que no tiene nada que ver con los modelos enviados por la Sociedad de Fomento, que ha sido la que ha gestionado con el Patronato de Apuestas Mutuas y el Consejo Superior de Deportes este nuevo juego.

La apuesta nacional comenzó a fraguarse hace dos años, cuando Ramón Mendoza mantuvo conversaciones con el entonces director del Consejo Superior de Deportes, Benito Castejón. Con la llegada de Jesús Hermida al Consejo Superior, las negociaciones continuaron entre los directivos de la Sociedad de Fomento, el nuevo director general y el Patronato. De toda esta serie de entrevistas salió un compromiso del Patronato para estudiar la posibilidad de la creación de la apuesta de caballos. Desde hace ya más de un año, todo este tema ha estado, prácticamente, parado. Los directivos del hipódromo culpaban del retraso a la Administración, y éstos, a aquéllos.Un nuevo impulso se ha producido ahora, tras la entrevista del presidente de la Asociación de expendedores de quinielas con Luis Rozalén, que hace algún tiempo patentó en el Registro de la Propiedad Intelectual varios tipos de posibles apuestas. Una de ellas, la que se asemeja al modelo italiano, es la que parece haber gustado más a los receptores de quinielas. La apuesta sería sobre el ya famoso 1X2, de tal manera que se dividirían los caballos de una carrera por grupos, dándose a cada uno un signó; además de acertar el ganador de la carrera, habría que adivinar también el caballo colocado.

Luis Rozalén dijo a EL PAIS: "Como aficionado y como propietario de caballos, estoy interesado en que el tema de la apuesta nacional siga adelante; por ello estudié distintas posibilidades de combinaciones y las patenté. No es cierto que la apuesta que ahora interesa sea igual a la italiana, ya que la he inventado yo, como otros tantos modelos". Rozalén, además de enseñar la apuesta a los expendedores de quinielas, se ha entrevistado con José Ollero, del Patronato de Apuestas Mutuas. Hasta ahora ha sido Javier Górgolas el interlocutor que ha tenido en este organismo la Sociedad, de Fomento. De todos es conocido que las relaciones entre Ollero y Górgolas no son buenas, de ahí que no sorprendería mucho que, mientras Ollero apoya a Rozalén, Górgolas hiciera lo mismo con las propuestas de la Sociedad de Fomento.

"Me he enterado por la Prensa de que había una propuesta de apuesta nacional para el hipódromo de un tal Rozalén. Este señor no ha venido a hablar conmigo. En mi poder, los únicos datos que tengo son los que Lahera, gerente de la Sociedad, me ha enviado, y que son, sobre todo, documentación sobre tipos de apuestas del extranjero", declaró Javier Górgolas. "Nosotros", añadió, "como todos los negocios, estamos deseando ampliar nuestro campo, pero debemos estudiar todas las posibilidades con mucho cuidado, ya que no podemos equivocarnos". Referente al tema del posible aumento del porcentaje que los receptores reciben de las quinielas, Górgolas dice que no habrá subida, que un 6% es suficiente y que le parece que están en su derecho al pedir más.