El próximo martes iniciarse las lluvias otoñales en España

Las predicciones elaboradas por el Instituto Nacional de Meteorología anuncian lluvias en la vertiente atlántica de la Península Ibérica a partir del martes próximo. La catastrófica situación del campo y los embalses españoles todavía podría salvarse, aunque sea parcialmente, si tales lluvias se prolongan durante el resto del mes.La situación de total anormalidad climatológica que vive España actualmente no se centra tan sólo en la falta de precipitaciones, sino, sobre todo,, en el elevado nivel de temperaturas que se viene registrando últimamente. A título de ejemplo, la máxima del siglo en Madrid, para el mes de noviembre (22,1 grados centígrados), registrada por el Observatorio del Instituto Nacional de Meteorología (INM), en el Retiro, ea 1946, se vio, al menos, igualada de forma consecutiva en dicho observatorio los pasados días 2, 3, 4 y 5.

La situación, debida, como en el pasado verano, a una penetración de masas de aire de procedencia africana, se vivió no sólo en Madrid, sino en numerosos puntos de la Península. En Santiago de Compostela, Soria y Burgos se alcanzaron veinticuatro grados, y hasta treinta en Sevilla. En algunas áreas de las dos mesetas aparecieron espesas calimas, sin duda de procedencia sahariana.

La ausencia de precipitaciones también ha sido, y es, muy espectacular. Dos meses y ocho días después del comienzo del llamado ano agrícola ya se registran déficit respecto a la precipitación normal de hasta cien litros por metro cuadrado en áreas del sureste peninsular, de la meseta norte y de la región catalana, lo que hace que cuencas como las del Júcar y del Segura se encuentren a poco más del 10% en sus niveles de agua embalsada. La situación de anormalidad. climatológica que vive nuestro país desde hace más de dos años, y que algunos científicos relacionan con una inusitada actividad solar, puede tener una mejoría con la llegada de precipitaciones sobre la vertiente atlántica anunciada por el INM a partir del martes, tras el reforzamiento de un centro de bajas presiones situado al oeste de las costas portuguesas.