Esnaola, un "abertzale" importante de segunda línea
«Nosotros creemos que es muy difícil que exista paz ahora, y más cuando el Gobierno central no tiene ni ( ... ) imaginación ni ( ... ) generosidad ( ... ) cuando habla de la negociación para la consecución de la paz». Estas palabras de Iñaki Esnaola, publicadas ayer mismo por Egin en un artículo titulado ¿Es posible la paz?, resumen el estado de ánimo del sector político al que representa el abogado donostiarra.Esnaola no ha figurado nunca entre los dirigentes de primera línea de la coalición independentista Herri Batasuna (HB), pero su estrella registra desde abril de 1978, fecha en que se constituyó la alianza, un ascenso irresistible. Esnaola representa un valor en alza, ligado a la línea política de la Coordinadora Abertzale Socialista (KAS), organización que ha definido los cinco puntos mínimos cuya negociación con el Gobierno de Madrid reclama ETA Militar para llegar a un alto el fuego.
A pesar de su indudable peso político en la coalición, que no ha hecho más que acrecentarse en los últimos meses, frente a personalidades históricas, como Miguel Castell o Francisco Letamendía, Ortzi, Iñaki Esnaola ha ofrecido siempre la impresión de trabajar más alejado del primer plano público, aunque gozando de un importante caudal de confianza en su sector político.
Prueba de este grado de confianza fue su intervención en la huelga que mantuvieron los presos presuntos militantes de ETAm, trasladados al penal de El Puerto de Santa María (Cádiz) entre el 25 de agosto y el 20 de septiembre. Esnaola mantuvo el martes 15 de septiembre una entrevista con el director general de Instituciones Penitenciarias, Enrique Galavís, y obtuvo de éste un compromiso formal en el sentido de que todos los presuntos milis trasladados a El Puerto de Santa María se encontrarían de nuevo en la prisión de Soria, como ellos deseaban, para Navidades. Cuatro días más tarde, el abogado informó del resultado de su gestión a los detenidos. A las pocas horas quedaba suspendida la huelga de. hambre en todos los centros penitenciarios donde se encuentran presos de ETAm.
Esnaola ha tenido destacada participación en otros momentos de la vida política vasca, vitales para la estrategia de HB, como la visita del Jefe del Estado, que motivó la publicación en Egin de un artículo suyo expresivamente titulado Que el Rey lo sepa: no le queremos aquí, o la defensa de la empresa editora del periódico citado frente a los redactores en huelga, que trataban de mantener unos principios profesionales en lo que más tarde llegaría a ser el portavoz oficioso de la coalición HB. En reiteradas ocasiones se le ha atribuido intervención en negociaciones relacionadas con el llamado impuesto revolucionario y en presuntas conversaciones entre ETA y representantes gubernamentales, que en este último caso siempre ha negado.
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