Desierta la subasta de los dos últimos barcos de Letasa

No se han presentado licitadores en la subasta celebrada ayer en Madrid del buque granelero (bulkarrier) Soledad María, ni en la superpetrolero Mónica María, propiedad de la naviera Letasa, actualmente en proceso de liquidación tras su quiebra, según EFE.El primero de estos buques, de 40.000 toneladas de registro bruto (TRB), ha salido en un precio inicial de mil millones de pesetas, y el segundo, de 300.000 TRB, en 3.700 millones de pesetas.

Se espera que en la próxima convocatoria, que se producirá dentro de dos meses, se presenten licitadores, pues para el Soledad María, que se encuentra navegando en la actualidad, existen varias ofertas de distintas compañías interesadas, que esperan la rebaja del 20% en el precio inicial que se producirá en la siguiente subasta.

Dichas compañías son naviera Castilla, Pando (Marítima Antares) y el grupo Asmar, Marítima Zorroza.

La subasta de estos dos buques de Letasa la realiza el juzgado especial que instruye la quiebra de la uompania para llevar a efecto las ejecuciones de las correspondientes hipotecas.

El Mónica María, actualmente fondeado en Vigo, es un barco de muy difícil encaje y en el mercado internacional es posible que quizá no tenga valor superior a los mil millones de pesetas.

Para la liquidación definitiva de Letasa sólo falta la colocación de estos dos barcos y los 78 trabajadores que quedan aún en la plantilla de la empresa.