Continúan las jornadas sesteantes

Ha comenzado la semana en las Bolsas españolas con unas sesiones desdibujadas, donde el ambiente veraniego volvía a dominar la mortecina actividad de unos corros, a los que apenas llegaban órdenes, y la actividad de los operadores resultaba de puro oficio.Quizá lo más destacable de estas reuniones haya sido el desconcierto que cunde entre los inversores a corto, quienes siguen sin encontrar el valor de sus sueños.

El grupo bancario, en plan sombra de sí mismo, contó con más órdenes de venta que compradores, ya que era sólo Banesto quien presentaba unos saldos positivos que se aproximaban a los 8.500 títulos. En el extremo opuesto de la balanza aparecía el Santander, cuyas ventas conocidas sumaban casi 40.000 acciones, Por su parte, el Exterior continuó imparable su camino de ampliación. Los cierres del sector resultaron flojos, manteniéndose la superioridad de la oferta después de hora.

El sector eléctrico presenta como constante sus niveles de resistencia a la baja, y muy poca cosa más. En químicas, ayer sufrió una severa corrupción Petróleos, y entre las siderúrgicas, Tubacex se tomó un respiro a su serie ininterrumpida de subidas, mientras que Felguera continuó apurando su buen momento. Al parecer, Telefónica contó con alguna partida vendedora de consideración, que al ser distribuida entre los cuatro mercados, no causó mayores problemas.