Los JJ OO de Barcelona pueden ser un estímulo para la economía

El Círculo de Economía de Barcelona valoró como un elemento muy positivo la posibilidad de que los Juegos Olímpicos de 1992 puedan llegar a celebrarse en Cataluña. El Círculo de Economía de Barcelona considera que la petición oficial del Ayuntamiento de la Ciudad Condal de solicitar la designación de esta ciudad, como sede de los Juegos de ese año debe ser tratada de forma positiva, con todos los condicionamientos exigibles por la difícil coyuntura actual, puesto que «puede ser un factor de estímulo para nuestra economía».

Considera también que debería buscarse el punto de equilibrio entre calidad y austeridad, además de eficacia, funcionalidad y sencillez y, sobre todo, el aprovechamiento posterior que Barcelona y las demás localidades puedan hacer de las instalaciones que se construyan.La organización de unos Juegos Olímpicos encierra gran complejidad y exige esfuerzos y sacrificios, pero también fe e ilusión, que puestas al servicio del dinamismo y de la capacidad creadora de Barcelona permitieron los rotundos éxitos internacionales de las exposiciones de 1888 y de 1929.

Dice, por último, el Círculo de Economía de Barcelona que, con independencia y complementariamente de las adversas condiciones económicas, parte de la crisis española se asienta en la falta de ilusión, y que la gran meta de los Juegos Olímpicos haría recobrar a España, en este caso identificada y personalizada en Barcelona, el sentido de iniciativa, protagonismo y afán de superación.