La resolucion política de la IV Conferencia del PSUC incluye el término "eurocomunismo"
Con 119 votos a favor, 49 en contra y 17 abstenciones fue aprobada en la tarde del pasado domingo la resolución política de la IV Conferencia del PSUC. Asimismo fue elegida la delegación de comunistas catalanes que tomarán parte en el 10º Congreso del PCE; la componen 174 personas.
Votaron en contra de la resolución únicamente los miembros del sector prosoviético, gran derrotado en esta conferencia. Con ella han tenido una mayor oficialidad dentro del PSUC el término eurocomunismo, rechazado en su último congreso, hace tan sólo seis meses.Otra nota destacada de la conferencia ha sido el reforzamiento de la imagen de Francesc Frutos, actual secretario general del PSUC. De este modo se aleja, por lo menos momentáneamente, la posibilidad de un congreso extraordinario. Se da la curiosa circunstancia de que los sectores prosoviéticos y socialdemócrata o bandera blanca -es decir, los situados más a la izquierda y más a la derecha- son los que ahora reclaman el congreso extraordinario, que cada vez resulta de más imposible convocatoria.
El reforzamiento de Frutos implica también el fracaso de los deseos de protagonismo por parte del secretario general saliente, Antoni Gutiérrez. Este, desde que dejó el cargo, ha estado intentando situarse de la mejor manera para acceder al poder. Desde la derecha del partido no se olvida que Gutiérrez estuvo al servicio de los sectores de izquierda del partido durante largos del eses, hasta que estos mismos sectores propiciaron su caída. Desde la izquierda del partido se ve ahora a Gutiérrez como una persona que se ha ido acercando a posiciones de los socialdemócratas en busca de una oportunidad para recuperar el cargo perdido. Por ello, desde uno y otro lado, se prefiere mantenerlo apartado del poder, por razones distintas.
En los trabajos en las distintas comisiones de la conferencia también se produjeron amplias derrotas de los prosovíéticos. Este sector proponía, como es habitual, preferencias al carácter ejemplar de la revolución soviética de 1917, con papel positivo de este país en la política internacional, suprimir las condenas a la intervención militar en Afganistán y retirar las declaraciones de apoyo al proceso democratizador en curso en Polonia. En todos estos puntos fueron derrotados ante la ofensiva de los leninistas, desde siempre contrarios a la política interior de la Unión Soviética.
Los prosoviéticos, en los debates en comisión, acusaron a los bandera blanca de tener actitudes liquidacionistas. Es decir, de pretender la desaparición de los partidos comunistas para integrarse en los socialistas.
La delegación catalana al congreso del PCE comprenderá todas las corrientes. En efecto la componen en primer lugar los 110 miembros del Comité Central del PSUC (de los cuales unos 35 son prosoviéticos) y además 81 militantes elegidos directamente en la, conferencia del PSUC, ya que a los 110 miembros del Comité Central del PSUC hay que restar aquellos que asistirán en condición de miembros del Comité Central del PCE y pertenecen a ambos organismos.
