Beguin quiere capitalizar electoralmente su reunión con Sadat
La situación en Líbano y los riesgos que supone para el conjunto de la zona es el tema central de las conversaciones que sostendrán mañana en Charm el Cheij, en el Sinaí, el presidente de Egipto y el primer ministro de Israel. La iniciativa de la reunión ha sido del líder israelí, lo que ha servido a la oposición de su país para interpretar la aceptación de Sadat como un apoyo implícito a Beguin en las próximas elecciones legislativas del 30 de junio.Aunque el presidente Sadat mantiene puntos de vista diferentes de los de Beguin -sobre todo porque pide el fin de los vuelos sobre Líbano de la aviación israelí, además de la retirada de las tropas sirias de territorio libanés-, Egipto está sobre todo interesado en que no estalle una guerra abierta entre Damasco y Tel Aviv, que, según El Cairo, aprovecharía principalmente a la Unión Soviética.
Para evitar verse implicado directamente en un apoyo electoral a Beguin, Sadat ha pedido «a todas las partes en conflícto» en Líbano que mantengan la «sangre fría». Además, el presidente egipcio ha invitado al líder de la oposición israelí, Simón Peres, a una entrevista próxima en Alejandría. Medios judíos, sin embargo, dan por descontado que Beguin pretende con su iniciativa implicar en su campaña electoral a su «amigo Anuar».
Otros temas que deben ser tratados mañana en la reunión de Charm el Cheij, son las divergencias entre ambos estadistas sobre el futuro de Jerusalén, el proyecto de autonomía para los palestinos de Cisjordania y Gaza, y la normafización total de relaciones entre Egipto e Israel. Para Sadat, un compromiso de Beguín para moderar su actuación en Líbano supondría un éxito diplomático que exhibir ante el mundo árabe.
Israel debe devolver a Egipto, antes de finales de abril de 1982 -según los términos del tratado de paz conjunto-, el último tercio oriental de la península del Sinaí, precisamente donde se encuentra la ciudad de Charm el Cheij.
La tensión entre Siria e Israel ha adelantado el regreso a la zona del enviado especial del presidente norteamericano, Philip Habib. Previsto inicialmente para la semana próxima, Habib volverá a Jerusalén el mismo jueves, poco después de que haya concluido la entrevista entre Sadat y Beguin.
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