Hipotecas de RTVE

La emisión. del telefilme francés Gaston Phebus, el León de los Pirineos es, como otros numerosos programas ya comprados por Televisión Española, una de las hipotecas que el anterior equipo directivo de RTVE dejó a sus sucesores, por más que aquéllos eran conscientes de su condición de candidatos a la dimisión.Las peripecias medievales de los protagonistas del telefiIme francés, incluidas las fantasías antihistóricas de los guionistas, son posibles en Televisión Española por dos razones distintas, pero complementarias.

La primera reside en la ignorancia de¡ equipo de programas de producción ajena, que capitaneaba Juan Julio Baena, quien ya en su día se encargó de destruir la Escuela Nacional de Cine. Probablemente adquirieron el programa sin entender el idioma francés y, con mayor seguridad, sin conocer la historia de España. Las prisas en el relevo del equipo directivo y en los doblajes forzados les impidieron aplicar a tiempo los rigores de la censura. Juan Julio Baena, a buen seguro, hubiera hecho con el reino de Navarra lo mismo que hizo con el camarero español de Hotel Fawlty: cambiar su nacionalidad.

El segundo motivo es todavía más grave, porque responde a una política totalmente errónea en la programación de los productos que llegan al telespectador español. Programas cinematográficos y telefilmes, extranjeros en su mayoría y ajenos, como justamente se denomina aquella subdirección de Televisión Española, a la historia e idiosincrasia de la audiencia. En junio de 1979 se inauguró el espacio Grandes relatos con emisiones a diario. De las aproximadamente 456 horas en bruto emitidas hasta ahora, tan sólo unas treinta pertenecen a telefilmes españoles: La barraca, Cañas y barro y Fortunata y Jacinta. Alrededor, por tanto, del 95% de los productos emitidos en este espacio son de procedencia extranjera, como son el resto de telefilmes y gran parte del cine que se emite por RTVE.

No es casual que los productores privados que concurrieron a la alternativa que representa la inversión de 1.300 millones de pesetas. para la creación de series nacionales hayan presentado todos ellos proyectos relacionados con nuestra historia y literatura. Mientras tanto, los telespectadores españoles tendremos que soportar que los directivos de Televisión Española sigan importando nuestra historia.