Los empresarios tratan de situar la media salarial en 1981 por debajo de la inflación

Para evitar el hundimiento de más empresas y la desaparición de puestos de trabajo, es necesario que el aumento promedio de los salarios pactados en 1981 queden situados por debajo del crecimiento previsible del índice de precios al consumo (IPC) para este año, según una circular que ha remitido la CEOE a todas sus organizaciones miembros.Esta circular, con las instrucciones y recomendaciones sobre negociación de convenios colectivos en 1981, dice también que el crecimiento de los salarios en nuestro país ha desbordado todas las previsiones en los últimos cuatro años. España ha sido entre los países del área occidental el que experimentó mayor crecimiento de los costes laborales (229,9%).

Datos anuales

En 1980, según la citada circular, el crecimiento medio ponderado alcanzó el 15,52 %,pero el índice de retribución media por hora trabajada registró un incremento anual del 18,6%. Todo ello-continúa la circular- justificaba la necesidad de ampliar y profundizar la banda por debajo del incremento del IPC posible, para tratar de que el crecimiento medio de los salarios permitiera reducir la inflación, no incrementar los costes salariales, permitir la competitividad de las empresas y el incremento de las exportaciones.

La circular de la CEOE hace referencia también a la revisión salarial para 1981, y a la cláusula de revisión pactada el pasado 3 de febrero por UGT y CEOE, y que fueron asumidas por USO el día 25 del mismo mes, y a otras materias incluidas en el acta de revisión salarial: normas y procedimientos, coordinación; asesoramiento y seguimiento de la negociación colectiva, y un anexo sobre algunos criterios y modelos orientativos para el caso de situaciones conflictivas.

La patronal solicita moderación en los tributos locales

Por otra parte, la CEOE ha cursado recomendaciones a sus organizaciones miembros sobre las modificaciones tributarias establecidas en el reciente decreto-ley sobre corporaciones locales, en el sentido de que los ayuntamientos respectivos adopten una línea de moderación en los incrementos que no pongan en peligro la supervivencia de las empresas de su territorio.Las modificaciones en los tributos municipales establecidos por el real decreto-ley afectan a las cuantías máximas de sus tarifas y ahora compete a los ayuntamientos aprobar los incrementos dentro de los nuevos límites autorizados.

La CEOE señala a sus organizaciones miembros que es preciso que los acuerdos que tomen los ayuntamientos adopten una línea de moderación, puesto que, si se agotase el techo de las posibilidades legales en cada municipio, se podría poner en peligro la continuidad de muchas empresas.