Plan de Hunosa para incrementar la productividad

La supresión del tope de incentivo a los destajistas habituales, que en lo sucesivo sería ilimitado; la reducción del complemento variable al 80% cuando dichos destajistas sean destinados a otra modalidad de trabajo; la penalización del absentismo y el incremento de la mecanización son las principales medidas que la dirección de Hunosa pretende aplicar para elevar la producción en un millón de toneladas subterráneas de carbón en 1984. También pretende alcanzar, en el mismo año, una productividad de 822 toneladas por picador al año, según la información facilitada ayer por la dirección de la empresa a los representantes de los trabajadores, en las negociaciones que se realizan para reestructurar la sociedad hullera.La empresa considera no discutible la necesidad de incrementar la productividad. «Primero», argumenta, «porque es algo vital para la sociedad, ya que no podemos mantener unos niveles decrecientes durante varios años y ahora estabilizados en los 728 kilógramos por jornal, porque eso representa descalificarnos en el campo de la competencia frente al resto de la minería subterránea española, y muchísimo más frente al próximo reto de la minería de la CEE, con la que aspiramos a convivir. Y segundo, porque nova ligada a criterios de mayor esfuerzo, sino a criterios de mayor racionalidad, mejor organización, equipos más adecuados y también, por supuesto, a niveles de esfuerzo normal».

La producción mecanizada para 1983, por medio de rozadoras, podrá alcanzar el 17,30%, y con cepillos, el 12,75%. El tema previsiblemente más duro de negociar va a ser el drástico cambio que se pretende introducir en el sistema de destajos. La dirección estima que el número de destajistas habituales es bajo y que, sin embargo, a través de otros medios se llega a percibir cantidades similares, a la vez que destaca la desmotivación de este personal por la imposibilidad de mejorar sus ingresos.

Para corregir tales deficiencias e incrementar la producti vidad, la dirección de Hunosa trata de limitar el actual tope máximo de 1.600 pesetas diarias de media mensual de incentivo que cobran los destajistas habituales, además de las 2.047 pesetas diarias de salario base. En este planteamiento se introduce una variante, ya rechazada por las centrales sindicales en la negociación colectiva del pasado año, consistente en que los destajistas actuales que trabajen al menos ochenta horas en un mes natural bajo la modalidad de incentivo individual o colectivo tendrán derecho, cuando sean destinados a trabajos por unidad de tiempo, a percibir como complemento variable/día el 80%, en vez del 100% del obtenido corno media/día de incentivo durante aquel período, siempre y cuando tal cantidad sea superior al promedio consolidado.

Para estimular la permanencia en trabajos por unidad de obra, la dirección oferta varios tipos de primas. Por otra parte, el premio de asistencia mensual a los destajistas habituales que asistan al trabajo con rendimiento normal y cumplan por entero su jornada estará en función de la asistencia. Quienes tengan cinco faltas o más en el mes quedarán excluidos de tal premio.